El futuro del fútbol estará permeado por la tecnología

El fútbol es una de las pasiones más importantes del mundo. Las muestras son incontables y en la más reciente Copa del Mundo vimos como los hinchas de diferentes pasiones se pueden juntar para celebrar lo que muchos llaman el deporte más lindo del mundo. Pero detrás de la cancha y los estadios, el deporte está cambiando mucho gracias a la tecnología. Los diferentes equipos e instituciones están adoptando soluciones y herramientas para mejorar el rendimiento, entender mejor a los jugadores y medir los diferentes factores en la cancha.

Los balones y los guayos

Hay dos ramas del fútbol donde ya estamos viendo los adelantos tecnológicos: los balones y la tecnología para saber si el balón cruzó la línea de gol. El Brazuca, nombre que recibió el balón usado en el mundial de Brasil, es uno de los más avanzados que hay en el mercado. Está compuesto de seis páneles de poliuretano que se juntan para crear una esfera casi perfecta. La superficie está dotada con pequeños puntos para que los futbolistas tengan más agarre y puedan imprimir más velocidad en sus disparos.

Según Intel, los balones de torneos pasados recibieron fuertes críticas de los arqueros y varios futbolistas por su impredecible trayectoria. El Brazuca, por su parte, fue probado por más de dos años y recibió el aval de estrellas como Lionel Messi, Iker Casillas y Zinedine Zidane.

Esto es apenas una muestra de la tecnología que están implementado los fabricantes en los balones. Los materiales seguirán evolucionando y llegarán nuevas tecnologías complementarias. Adidas, como parte de su solución miCoach, creó un balón que cumple con todas las regulaciones de la FIFA pero tiene integrado un sistema de sensores que permite medir diferentes variables como velocidad, rotación y la trayectoria. Toda la información llega a una aplicación para que el jugador o su entrenador puedan tener retroalimentación inmediata.

Los balones serán cada vez más inteligentes. Sobre todo a nivel profesional, las esferas tendrán varios sensores y chips que permiten medir el número de toques, la potencia de un impacto y saber si salió del terreno de juego o si fue gol. Una empresa podría recoger toda la información y crear un mejor balón, que incorpore la información de miles de partidos profesionales.

Además, Adidas, en este caso, podrá crear diferentes tutoriales para que los jugadores amateurs puedan mejorar su técnica y aprendan como pegarle al balón como James Rodriguez, o Roberto Carlos en su época.

Esto deberá ser complementado con la tecnología de línea, por llamarla de alguna manera. Con el chip dentro del balón y sensores alrededor del campo, los jueces no tendrán que tomar decisiones al instante que posiblemente afecten negativamente a un equipo.

Las cuatro grandes ligas en Estados Unidos ya tienen la regla para revisar una jugada en video para tomar una mejor decisión. Aunque eso le resta dinámica al juego, las grandes implicaciones que tienen los resultados deportivos en las economías mundiales debe ser razón suficiente para implementar esto en el fútbol. Con la televisión 4K, los sensores y los chips dentro de los balones, algunas decisiones podrán ser automáticas.

El gran argumento en contra es que la magia del fútbol incluye el error humano, hasta el de los jueces. Implementar tecnología para tomar mejores decisiones no eliminará esto, como tampoco lo hace en ninguna otra profesión. Solo hará el juego más justo, algo que seguramente los hinchas de Santa Fe querían el domingo.

El fútbol donde sea

Esos momentos en familia, donde todos están en la sala en frente del televisor, pasarán a la nostalgia. En el futuro, con las conexiones inalámbricas rápidas y la creciente disponibilidad de banda, ver fútbol será cada vez más fácil.

La explosión de los dispositivos llevado han jalado toda la industria del entretenimiento y de los deportes a lugares impensados hace algunos años. La Copa América será uno de los primeros ejemplos de esto: gracias a una alianza entre Claro y Caracol, los clientes de la compañía de telecomunicaciones podrán solicitar un código para poder ver los partidos del torneo continental desde un celular, una tableta o desde un computador.

En el futuro, el fútbol llegará a nuestras pantallas en 4K, con la posibilidad de escoger los diferentes ángulos y las diferentes tomas. No obstante, esto no será un obstáculo para la movilidad, ya que las conexiones inalámbricas seguirán evolucionando y los planes fijos tendrán más velocidad.

Esto hará que el fútbol sea más accesible para la gente. La adopción de los teléfonos celulares ha sido impresionante, lo que abre la puerta a que más personas puedan consumir este tipo de contenidos. Cualquier persona, aun sin un televisor, podrá ver la Copa América en su celular si es cliente de Claro.

Y en el futuro, ese modelo de negocio se mantendrá. Los prestadores de telecomunicaciones habilitarán sus servicios para que más personas puedan ver lo que quieran, donde quieran y cuando quieran.

La analítica de datos

Muchos de los técnicos del fútbol profesional sacar su experiencia de sus carreras como jugadores. Pep Guardiola jugó mucho tiempo en el Barcelona y nuestro líder, José Nestor Pekerman, estuvo en las filas de Argentinos Juniors y en Independiente Medellín. Una lesión en su rodilla lo obligó a retirarse del fútbol a los 28 años y asumir la dirección de las divisiones menores de varios clubes y seleccionados nacionales.

Sin embargo, el futuro del fútbol será mucho más tecnológico. En este momento, varias compañías están desarrollando sistemas para analizar el rendimiento de los jugadores en tiempo real. Por medio de cámaras, sensores y algoritmos, los nuevos programas pueden analizar los pases acertados y errados, así como los movimiento de los jugadores.

Así como en el fútbol americano, los entrenadores tendrán tabletas para ver las tomas desde arriba y tomar decisiones con más datos que corazón. Según Soccer Performance, también hay planes de meter GPS en la ropa (o en los guayos) de los jugadores para tener una posición exacta y ayudar al sistema a rastrear los jugadores.

Después de un tiempo, los clubes y sus managers tendrán una base de datos muy grande para analizar el rendimiento de los jugadores y su acople con el resto del equipo. La NBA es una de las ligas que más ha adoptado esta tecnología, usando diferentes herramientas y analíticas para sacar más provecho a jugadores que antes no rendían tanto. Por ejemplo, es posible que un defensa zurdo se acople mejor con el otro central titular, aun si su transferencia es más barata o que sea más efectivo con el perfil cambiado.

Por lo tanto, el papel del Director Técnico cambiará. Obviamente tendrá que usar su experiencia y su intuición para hacer los cambios adecuados, pero tendrá a su disposición una cantidad de datos para saber que jugador está corriendo menos, cual está errando más pases o cual está cerca de una amonestación por el número de faltas cometidas.

Los vestibles

El deporte ha sido, hasta ahora, el foco principal para vender wearables. Las manillas que miden los pasos y las pulsaciones, así como el ritmo cardiaco son enfocadas en deportistas o personas que quiere empezar a hacer ejercicio. Sin embargo, a medida que va evolucionando el mercado, vamos a ver los vestibles en otros aspectos de la vida.

Seguramente los fabricantes de guayos van a incorporar sensores en sus diseños para contar el número de pasos, los toques de balón, la potencia y otras variables. Con unos guayos inteligentes, las estrellas del fútbol seguramente tendrán zapatillas a la medida, fabricadas con impresoras 3D para que se ajusten perfectamente a su pie y a la forma de correr.

El futuro del fútbol es muy brillante. Y una de los factores más importantes será la tecnología.

Imágenes: 148apps, Adidas (vía Pinterest).