A muchos nos gusta viajar y tomar fotos. Sea lejos o cerca de casa, cualquiera con una cámara puede hacerlo. Pero lo que no todos tienen en cuenta, es que, para garantizar el éxito de una salida, primero deben cumplirse algunos requisitos. No solo basta con tener la cámara y la pasión, porque podrías perder el viaje, el tiempo y las ganas.
Primero, se debe tener muy claro qué fotos vas a tomar. Por ejemplo, si vas a tomar fotografías de paisaje con tiempo de exposición necesitarás el trípode. Si vas a tomar fotografía de naturaleza, seguramente necesitarás el lente macro. Pero si vas a hacer una inmersión en algún parque natural, vas a necesitar muchas cosas. Por eso te compartimos los ocho consejos a tener en cuenta en tu lista de requerimientos, antes de salir de casa.
Limpieza del equipo
Los equipos fotográficos son sometidos a diversos ambientes. Puedes tomar fotos en la playa, en la nieve o bajo la lluvia. Esto puede generar manchas en el lente y daños en el equipo, por lo que te recomiendo limpiarlo todo antes y después de tu salida.
Todo debe ser tratado con mucha delicadeza. El exceso de fuerza o el uso de materiales no adecuados pueden rayar los lentes y dañar los sistemas del equipo. Para evitar eso, debes usar paños de microfibra, similares a los que vienen con las gafas.
Limpiar tu equipo en casa te permitirá ahorrar tiempo en tu sesión. Además, evitará que más suciedad entre al equipo si necesitas separar el lente del cuerpo del mismo. O peor aún, que las fotografías queden con manchas.
Abre tu mente
Así como para escribir mejor hay que leer mucho, para tomar buenas fotografías hay que observar bastante. Observar libros de fotografía, ver el trabajo de otros fotógrafos y revisar tu material constantemente ayudará a abrir tu mente. Una vez analices el trabajo de los demás, podrás darles tu propio toque a tus imágenes. Ya sea desde un ángulo o con una técnica diferente, siempre podrás darle tu toque a las imágenes que captures.
Planifica tu viaje
Llevar un mapa en físico o en Google Maps, será de gran ayuda. Cuando nos disponemos a tomar fotografías, regularmente la noción del tiempo se pierde. Además, logramos recorrer grandes distancias que, sin quererlo, pueden hacernos perder la orientación. Precisamente para evitar inconvenientes, es importante contar con el mapa, una brújula y los horarios de las rutas de transporte para el regreso a casa.
Batería cargada
Nunca se sabe cuánto tiempo o cuántas fotos vayamos a tomar en una salida. Por eso es importante llevar totalmente cargada la batería de la cámara. Aunque las nuevas baterías tienen una durabilidad importante, es mejor evitar sorpresas. Y si tienes la posibilidad de llevar una segunda batería totalmente cargada, mucho mejor. Así no tendrás que terminar tu sesión y quedarte con ganas de más fotografías.
Una vez haya finalizado la carga de tu batería, insértala en la cámara y realiza varias tomas de prueba. En ocasiones, el símbolo de la batería se muestra totalmente cargado, pero al disparar queda en dos tercios. Además, dependiendo del equipo que tengas, podrás conocer el porcentaje real de la batería y cuánto tiempo durará. Sin duda, este consejo aplica para todo equipo que vayas a usar y que tenga batería. Ya sea un flash, una luz o un disparador remoto, verifica con precisión el nivel de batería de cada uno.
Memorias listas
Sin batería no hay energía. Pues sin memoria no hay capacidad. Así como la batería es vital para la cámara, las memorias también. Aunque pueda parecer obvio, el no llevar una memoria a la sesión es un error común. En ocasiones, luego de una sesión insertamos la memoria en el computador y la olvidamos. Así que antes de salir es mejor revisar que esté limpia y tenga la suficiente capacidad.
El número de memorias para llevar a una salida depende del objetivo. Por ejemplo, si tomas las fotos en formato RAW, debes tener en cuenta que cada archivo es más pesado. Además, en este formato la cámara guarda dos archivos por cada foto. Por eso, si la sesión va a ser extensa, es mejor que portes varias memorias.
Una forma sencilla de garantizar la total limpieza de la memoria es insertándola en el equipo y formateándola desde la configuración. Y no sobra decir que debes procurar guardarlas en un bolsillo seguro de tu morral. Esto evitará que se mojen, doblen o dañen por el clima y los movimientos del morral.
Lleva lo necesario para tus fotografías
La comodidad es lo más importante para que la fluidez del trabajo sea buena. Lo esencial para una salida es el cuerpo de la cámara, la batería, la memoria y el lente. Sin embargo, una vez más, depende de qué salida vayas a tener.
Nadie está exento de ensuciar el lente o querer limpiar el equipo. Tampoco de necesitar algunos filtros y luces. Por eso, un kit secundario y poco incómodo sería un flash externo, kit de limpieza filtros y un parasol. Con esto y el equipo básico, no tendrás que preocuparte por cargar un equipo pesado e incómodo para una salida que no lo amerita.
Otro elemento que puede ser importante es el trípode. Existen de todos los tamaños y peso, los cuales están destinados a ayudarte a tomar fotografías en tiempos de exposición prolongados, panorámicas y fotografía nocturna. Y finalmente, una decisión muy importante debes tomar: qué lentes llevar. Nunca sabemos lo que pueda presentarse en el camino. Ya sea una abeja en un girasol polinizando, un grupo de hormigas marchando con hojas de un árbol, etc.
Dependiendo de la escena vas a necesitar un lente. Por eso te recomiendo que lleves entre 2 y tres lentes. Primero el lente que consideres necesario para tu sesión. El segundo debe ser un teleobjetivo para captar fotografías a distancias lejanas. Y el tercero debe ser un macro, con el que no perderás la oportunidad de fotografiar las escenas del mundo en miniatura.
Mochila para el equipo
Ya elegimos todo lo necesario, así que sabemos cuánto espacio necesitaremos. Regularmente el fotógrafo carga el equipo en el 99% del viaje. Así que debes escoger una maleta que, aunque la carga sea pesada, te dé la máxima comodidad posible.
En el mercado existen mochilas ‘duras’. Y en realidad lo son, ya que no pierden su forma a pesar del peso. En su interior cuentan con compartimientos para colocar cada elemento. Y lo mejor de ello es que los espacios son modificables para cada tipo de ocasión. Pero si vas a llevar poco equipo y quieres mantener el bajo perfil, puedes usar una maleta corriente.
Provisiones para el camino
Si vas a estar un buen tiempo caminando con tu pesado equipo, debes llevar algo que compense el desgaste corporal. Lo recomendable, antes de salir es ingerir alimentos ricos en líquido. Pero durante el trabajo de campo, seguramente necesitarás más líquido. Una botella de agua y una bolsa de maní pueden ser dos grandes aliados para la salida.
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