Una investigación de Science reveló un nuevo proceso con el cual los médicos o farmacéuticos podrían fabricar medicamentos bajo demanda para detener brotes de epidemias. Actualmente, la producción de medicamentos solo ocurre en corporaciones farmacéuticas gigantescas con equipos valorados en millones de dólares. Sin embargo, investigadores de la Universidad de Glasgow dieron a conocer un proceso de creación de pequeños reactores que pueden producir medicamentos. Esto se logra utilizando una impresora 3D de 2.000 dólares.
En la actualidad, la impresión 3D ya tiene un amplio alcance. Se usa para hacer desde zapatos y partes de autos hasta vasos sanguíneos y pistolas. Por tal razón, no sorprende la incursión de los científicos en la creación de productos farmacéuticos. “Pretendemos ir más allá de la preservación de las aplicaciones de fabricación industrial y creación de prototipos. Revolucionar la relación entre el diseño, la fabricación y el funcionamiento de dispositivos funcionales y explotar el creciente uso de la impresión 3D en la automatización de las ciencias químicas” describen los investigadores para Science.
El proceso con los reactores hace posible que cualquier persona pueda fabricar medicamentos. Por un lado, los médicos de las naciones en desarrollo podrían producir drogas rápidamente para reducir los brotes. E incluso, la revolución que podría causar esta técnica permitiría que eventualmente, cualquier persona produzca su propio ibuprofeno en casa.
Simplificando el proceso para crear medicamentos
explica que, usando la impresora 3D, los investigadores construyeron varias vasijas del tamaño de una botella de agua que pueden llevar a cabo cuatro reacciones químicas diferentes en 12 pasos, incluido el filtro y la evaporación. Estas se convierten en fábricas de reacción en miniatura, lo que permite a los farmacéuticos o médicos crear medicamentos específicos al agregar solventes y reactivos en momentos específicos del proceso.
Empleando dicha técnica, los investigadores crearon el relajante muscular baclofeno, y también produjeron drogas anticonvulsivas y úlceras utilizando diferentes reactivos. El proceso podría extenderse para producir muchos otros tipos de medicamentos diferentes. El documento dispuesto por los investigadores señala que los productos químicos en sí mismos podían guardarse en “cartuchos autocontenidos”, con el fin de preservarlos hasta su demanda.
Imagen: Science
Sobre este particular, y pensando sea de interés, les comparto mi artículo sobre: ´´ Los Derechos de Propiedad Intelectual frente a las vicisitudes planteadas por las impresiones en tres y cuatro dimensiones (3D y 4D) ´´, donde nos referimos de manera expresa, entre otros al tema de los medicamentos.
http://bc.com.co/es/noticiasypublicaciones/010