Internet es el rey a la hora de viajar barato. Los ingresos de las agencias de viaje físicas en Colombia, por ejemplo, disminuyeron en 2,9% en el último año, con respecto a 2016, de acuerdo con el Dane. Esto se puede complementar con que el 68% de los consumidores a nivel mundial reservan exclusivamente a través de Internet, según informa Conecta Turismo. Es decir, los usuarios se dieron cuenta que para conseguir los mejores precios lo mejor es buscar desde el computador o smartphone.
¿Cómo encontrar vuelos baratos a cualquier destino?
Por lo tanto, para viajar barato es importante comparar en Internet las diferentes opciones que existen. Para eso, existen varias herramientas en línea llamadas comparadores. Estos no son agencias, es decir, la transacción no se hace con ellos directamente, sino que funcionan como una especie de Google para viajes. Una de estas opciones es Viajala. Esta compañía compara los precios de diferentes aerolíneas y hoteles para mostrar la mejor opción a cualquier destino. Actualmente, opera en Colombia, Brasil, Chile, México, Argentina, Perú, Ecuador y España.
1. Compara todas las opciones de tiquetes
Las mejores ofertas se encuentran cuando se hace una búsqueda exhaustiva. Por lo tanto, la compañía afirma que en efecto se debe hacer una búsqueda en metabuscadores, pues estos agrandan el espectro más allá de si solo se busca en determinada aerolínea. Esto incluye buscar si es mejor comprar el pasaje de ida y vuelta, por separado o a través de diferentes aerolíneas.
2. Reserva con anticipación para viajar barato
El sentido común nos dicta que si compramos un pasaje de un día para otro este va a salir más caro. De acuerdo con los datos obtenidos por Viajala, el momento ideal para reservar un tiquete en Colombia es de tres semanas para vuelos nacionales y 40 días antes para vuelos internacionales. Según el buscador, después de estas fechas los pasajes podrían aumentar un 25% en promedio.
3. La planeación es clave
Además del tiempo de anticipación, en el año existen momentos de mayor y menor demanda. Esto se conoce coloquialmente como temporada alta y temporada baja. Según los datos de Viajala, la temporada alta incluye meses como enero, junio y marzo. Por su parte, la temporada baja (y de mejores precios) incluye meses como mayo u octubre. Así, es una 15% más barato viajar en mayo en vez de marzo. Además, la compañía afirma que viajar el martes es un 9% más barato que viajar viernes, domingo y lunes.
4. Aprovecha los programas de millas
Las grandes aerolíneas cuentan con programas de fidelización en los que entregan millas a sus afiliados. El de Avianca se llama Lifemiles mientras que el Latam se conoce como Latam Pass, pero estos no son los únicos a los que pueden acceder los colombianos. En ellos, los afiliados pueden ganar millas al volar, pero también al usar sus tarjetas de crédito afiliadas y al comprar en establecimientos de comercio que hagan parte del programa. También, los bancos ofrecen tarjetas de crédito que no necesariamente tienen el logo de la aerolínea pero que después de un monto mínimo de puntos se pueden cambiar por millas. Incluso, algunos supermercados cambian los puntos por millas en los programas de viajero frecuente.
Para redimir las millas, es necesario mirar cuáles son las condiciones. Algunas aerolíneas permiten hacer la compra de tiquetes con una parte en millas y otro en dinero. Además, con las millas sucede lo mismo que con el dinero. Por ejemplo, al buscar un pasaje Bogotá – Frankfurt es posible que la cantidad de millas sea muy alta. Sin embargo, se podría buscar rutas más comunes como Bogotá – Miami y luego Miami – Frankfurt y conseguir una mejor oferta de millas.
5. Intenta aterrizar en aeropuertos menos congestionados
En Colombia no es tan común esta práctica, debido a que en muchas ciudades solo existe un aeropuerto. Sin embargo, podría darse que en ciertos casos, sea más barato volar a Barranquilla que a Santa Marta, a Pereira que a Armenia o Manizales, entre otros. En Europa, por ejemplo, es frecuente que sea más barato llegar a una ciudad secundaria que a las grandes capitales.
Imagen: Cronislaw y ScofieldZa (vía iStock).