La inteligencia artificial nos está ayudando a hacer diversas labores en múltiples campos de estudio y trabajo. Esta tecnología, sin duda alguna, será una de las más importantes en los próximos años. Pero muchas especulaciones pesimistas afirman que los sistemas de inteligencia artificial reemplazarán el trabajo de los humanos. Aunque ya se ha dicho en varias ocasiones que eso está muy lejos de ser cierto, siguen las creencias.
Se ha hablado de muchas labores y profesiones que podrían ser reemplazadas por la inteligencia artificial. Entre ellas está la abogacía. Un algoritmo de aprendizaje de máquinas puede ‘leer’ todos tus códigos y libros en minutos. Puede recordar en segundos cualquier precedente legal jamás instaurado en la historia. Y puede compilar toda la información posible en sus electrodos, disponible en cualquier momento.
Los sistemas de inteligencia artificial ahora pueden asistir cualquier labor de investigación mucho mejor que una persona. Pero eso no significa que vayan a exterminar a las profesiones, o en específico a los abogados, nos explica un artículo de The Next Web. En su lugar, la tecnología de blockchain sí podría ser el destripador de los abogados.
Cuando los abogados ya no sean necesitados para ser árbitros de contratos, una gran porción de su propósito laboral será destruida de la noche a la mañana. El blockchain ofrece el potencial de eliminar esta necesidad rápidamente. Por definición, blockchain ofrece contratos inteligentes, que reemplazan el papeleo instantáneamente. La cadena de bloques solo transfiere un pago cuando se cumplen las condiciones apropiadas.
Piensa en un ejemplo. Un pago de una entrega de arroz solo se hace cuando el vehículo que lleva el producto alcanza una determinada coordenada en un mapa. El blockchain actualiza el sistema y el libro contable registra toda la información para todas las partes interesadas. Sin intermediarios, sin disputas, solo datos registrados para ser vistos. Cualquier disputa puede ser resuelta viendo la información registrada. Solo en caso de un problema realmente complejo se necesitaría a un abogado.
La clave son los contratos inteligentes
La eliminación de un profesional en el centro de estas contratos simplifica todos los procesos. Erradica cualquier conflicto de interés, por ejemplo. Esto tiene que ver con el pago de comisiones.
Ante estas afirmaciones, el medio dice que pueden surgir muchas dudas y es válido no estar de acuerdo. Se puede argumentar que existen estándares éticos que no tienen las máquinas, por ejemplo. Pero a los contratos inteligentes no les interesa. Son una tecnología que existe y que es útil, no tiene ningún motivo oscuro detrás.
Quizá lo que se podría hacer es aceptar un cambio en el paradigma de las labores humanas. Y creer que podemos confiar en otras personas, con un libro contable público y contratos inteligentes, concluye el medio.
Imagen: Pixabay.
a los litigantes también se les podría reemplazar
atte: watson