Probablemente recuerdas que hace varios años las cámaras de los celulares no eran para nada confiables. Sí, tomaban fotografías para subir a redes sociales, pero nadie las veía como una opción para una fotografía verdaderamente seria.
En la actualidad, las cámaras de celulares acabaron con el mercado de las ‘point and shoot’. Esas eran aquellas cámaras con cuerpo pequeño que todos cargábamos para irnos de vacaciones y hacer un álbum memorable de nuestros viajes. Una de las razones por las que ha pasado esto es por la implementación de varias cámaras en los celulares, al punto de que existe una opción para cada tipo de foto que se quiera tomar.
Cámaras: cuando cuatro ojos ven mejor que dos
La sabiduría popular afirma que cuatro ojos ven mejor que dos. Probablemente, quien inventó el dicho pensó en que en algún momento de la historia las cámaras de los smartphones tendrían más de un lente. Al comienzo, llegaron cámaras traseras con dos módulos, como la del Galaxy Note8 o la del iPhone 7 Plus. Sin embargo, los fabricantes han sido más osados e hicieron lo impensable: pusieron tres y cuatro cámaras en los dispositivos.
Estas han sido la respuesta de los fabricantes de smartphones por mejorar la fotografía. Además, gracias a ellas los usuarios tienen mayores herramientas. Por ejemplo, teléfonos como el Huawei Mate 20 Pro o el Galaxy A9 cuentan con lentes zoom, al mismo tiempo que lentes gran angulares. Estos, en vez de trabajar al mismo tiempo, funcionan de manera separada. De esta forma, es casi como si los usuarios llevaran consigo un set de lentes para conseguir estos efectos en las fotografías.
De cierta manera, este tipo de mejoras en los dispositivos democratizan la fotografía, enseñan al usuario y lo motivan a hacer contenido de mayor calidad. Aunque, bueno, no a todos. Pero creemos más en su efecto positivo que negativo.
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Imagen: montaje ENTER.CO.
