Aunque el Día de Internet Seguro se celebró ayer, martes 5 de febrero, los hábitos seguros son cosa de todos los días. Por eso, compartimos hoy con ustedes información de la firma de seguridad informática Eset sobre el uso de redes Wi-Fi públicas.
La compañía compara conectarse con una red pública abierta con dejar nuestras pertenencias en cualquier sitio y señala los siguientes como los mayores riesgos de hacerlo:
Ser víctima de un ataque Man in the Middle
Como su nombre lo indica, los de ataques Man in the Middle (hombre en el medio) están relacionados con la presencia de un intermediario entre la víctima y el sitio que esta visita. De esta manera, el cibercriminal puede acceder a los datos mientras viajan.
Precisamente por eso son muy difíciles de detectar, pues la información es interceptada a mitad de camino cuando se mueve entre el dispositivo de usuario y el router, sin que sea percibido.
Robo de datos personales, información confidencial o credenciales
“Si la red Wi-Fi a la que te conectas no es lo suficientemente segura, los datos que guardas en tu computador o teléfono (archivos personales o contraseñas) pueden quedar expuestos al robo”, asegura Eset.
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Falsos puntos de acceso se presentan como redes sin clave
“Cada vez es más común encontrarnos con redes Wi-Fi en lugares públicos sin ningún tipo de seguridad. Si se trata de un café, por ejemplo, es normal ver que el nombre del lugar figura también como nombre una red”, afirma la compañía de seguridad. En estos casos, es importante tener presentes dos cosas:
Nunca es recomendable conectarse a redes sin clave, pero si decides hacerlo es aconsejable consultar cuál es el nombre de la red de ese lugar para comprobar que efectivamente sea el que ves en tu pantalla.
Por otro lado, es posible (y sencillo) que un atacante aproveche estas conexiones para clonarlas (montando una red con el mismo nombre) para utilizarla como un señuelo a la espera de que los usuarios se conecten y enlacen sus dispositivos a la antena del atacante. Si esto ocurre, todos los paquetes de conexión que entren y salgan pasarán por el equipo atacante, quien podrá ver y modificar todo a voluntad.
Router vulnerado
Así como los computadores y smartphones pueden infectarse, también existen vulnerabilidades presentes en otros dispositivos conectados, como los routers (enrutadores). Tal vez el ataque se trate de un simple secuestro del ancho de banda, o podría incluso escalar hasta convertir a los dispositivos infectados en partes de una botnet.
Existen precauciones que debes tomar si decides conectarte a una red pública, que compartiremos contigo luego. Pero, en la medida de lo posible, evita hacerlo, en especial si se trata de redes abiertas, sin contraseñas. Y, al menos, hazte el favor de no realizar transacciones en ellas.