Uno de los problemas que tiene la tecnología actual son los límites éticos. Es cierto, la humanidad se puede beneficiar mucho de esta, pero también se puede usar con fines contrarios y que solo beneficien a unos cuantos.
Teniendo en cuenta lo anterior, diferentes empresas han tenido problemas en cómo y a quiénes les venden su tecnología. Por ejemplo, cientos de empleados de Amazon firmaron una carta pidiéndole a la empresa que dejará de suministrar su tecnología de reconocimiento facial a las fuerzas militares de Estados Unidos.
Así mismo, Google hace unos meses anunció que no vendería su tecnología de inteligencia artificial y reconocimiento facial pero que trabajaría con organizaciones y fundaciones para usar esta tecnología de forma que le beneficie a la humanidad.
Sin embargo, parece que los planes han cambiado y Google sí quiere sacarle provecho comercial a sus desarrollos en inteligencia artificial y reconocimiento facial. Pero para evitar problemas –o como medida de contingencia– ha decidido crear un Consejo asesor externo de tecnología avanzada, explicó Google en un comunicado.
Qué es el Consejo asesor externo de tecnología avanzada de Google
La idea es que este consejo le ayude a evaluar a la empresa cómo se puede usar y los límites de la inteligencia artificial. Por ejemplo, usos del reconocimiento facial y equidad en el aprendizaje automático. Para esto se reunirán cuatro veces al año para evaluar los avances de la compañía y dar una retroalimentación.
Los miembros del consejo también fueron presentados en el comunicado. En total son ocho personas reconocidas por su trabajo en tecnología y específicamente en inteligencia artificial, entre los más destacados personajes está Alessandro Acquisti, investigador de la privacidad y del comportamiento de la economía, y De Kai, investigador de procesamiento natural del lenguaje, tecnología musical y aprendizaje automático.
Imagen: Google y Andrey Popov (Vía iStock).