Recientemente, Samsung lanzó su nueva línea de smartphones compuesta por los equipos Galaxy S10, S10e y S10+; pareciera que fueran iguales pero diferentes al mismo tiempo. Además, si llegas a la tienda o miras sus precios por Internet, es probable que sientas más confusión todavía debido a que sus precios son bien diferentes. Pero no te preocupes, porque aquí estamos para explicarte en qué se diferencian estos dispositivos, cuáles son sus fortalezas y cuáles sus debilidades.
No solo el tamaño es diferente
Sí, los Galaxy S10 tienen diferencias en el tamaño de su pantalla y, por ende, su tamaño general. Por ejemplo, el S10+ cuenta con un panel de 6,4 pulgadas. Por su parte, el S10 tiene una pantalla de 6,1 pulgadas, mientras que la del S10e tiene 5,8 pulgadas. Este último, además, no tiene pantalla curva a los lados. Por el contrario, su parte frontal es plana, a diferencia de los dos modelos más grandes.
Los precios también difieren, puesto que el de mayor tamaño tiene un precio de 3.699.900 pesos (si bien también existe una versión de cerámica que cuesta 4.399.900 pesos). El equipo de la mitad cuesta 3.299.900 pesos y el S10e cuesta 2.699.900.
En cuanto a las especificaciones, es necesario puntualizar. Los tres equipos tienen el mismo procesador, el Exynos 9820. Sin embargo, mientras los dos teléfonos de mayor tamaño cuentan con 8 GB de RAM, el S10e tiene 6 GB de RAM (que tampoco es poco si se le compara con la competencia).
Las cámaras de los S10: similitudes y diferencias
En general, las cámaras principales de los Galaxy S10 son parecidas. Todos los equipos cuentan con una cámara trasera gran angular de 12 megapíxeles con apertura dual y una cámara ultra gran angular de 16 megapíxeles. Además, una de las cámaras frontales de estos equipos es de 10 megapíxeles. La diferencia en este sentido radica en los módulos adicionales que los dos smartphones de mayor tamaño tienen.
Las cámaras traseras
El Galaxy S10+ tiene cinco cámaras: tres en la parte posterior y dos en la parte anterior. De los tres, es el equipo que más cámaras tiene. La anatomía de sus cámaras traseras es, en primer lugar, un lente gran angular con ángulo de visión de 77º. Su sensor es de 12 megapíxeles y tiene apertura dual que se ajusta entre los valores f/2,4 y f/1,5. Esto permite controlar de mejor forma la entrada de luz y obtener buenos resultados tanto en el día como en la noche.
El segundo lente es un lente ultra gran angular con un ángulo de visión de 120º. Este lente permite poner más elementos en una imagen, pero con cuidado, pues los elementos más cercanos al centro y al lente se verán distorsionados. Lo cual no es necesariamente un problema, pues es una cámara pensada para la toma de paisajes o panorámicas.
Por último, se encuentra el teleobjetivo. Este es un lente zoom con sensor de 12 megapíxeles que permite tener de 0,5X a 2X de acercamiento. Esta misma configuración la tiene el S10 convencional, mientras que el S10e no tiene el lente zoom, pero sí los dos anteriores.
Las cámaras frontales
El único de los tres nuevos smartphones de Samsung que tiene dos cámaras frontales es el Galaxy S10+. Este tiene el lente principal con sensor de 10 megapíxeles y uno adicional de 8 megapíxeles que permite mejores efectos como el enfoque dinámico más preciso en las selfies.
Sus hermanos menores tienen un solo lente en la parte de adelante. No obstante, esto no implica que no cuenten con la función de enfoque dinámico con la cámara frontal, pues también logran buenos resultados gracias al procesado de las fotografías.
El Galaxy S10+
En definitiva, el Galaxy S10+ es el equipo con mayores prestaciones de los tres. Aunque el Galaxy S10 tiene sus mismas cámaras traseras y RAM, el S10+ cuenta con una cámara frontal adicional, por lo que será una mejor opción para los amantes de las selfies. Además, quien quiere aprovechar un mayor espacio en la pantalla y consumir contenidos multimedia, este equipo podrá satisfacer sus necesidades.
Pero su tamaño viene con varios sacrificios. En primer lugar, en ergonomía. El equipo, sin una carcasa, se siente bastante resbaloso y puede caerse fácilmente. Además, por lo menos en mi experiencia, su pantalla es muy flexible en los bordes y, por ejemplo, cuando estoy chateando ocurren toques involuntarios y uno termina enviando emojis o stickers sin querer.
El Galaxy S10
El equipo de la mitad se mueve entre los dos mundos. Cuenta con el mejor rendimiento posible en un Galaxy S, tiene un menor tamaño que el S10+ y tiene sus mismas cámaras. Inclusive, el S10 tiene elementos como el lector de huellas en la pantalla, que es una de las novedades de estos teléfonos que no habíamos visto en ningún otro equipo de la marca.
Sin embargo, este equipo puede verse eclipsado por el S10e, pues el pequeño es un gran dispositivo. La decisión, para los usuarios debería basarse en el tamaño, pero su precio, por lo menos en Colombia, le resta un poco de atractivo.
El Galaxy S10e
Este es el teléfono más versátil de toda la línea. Su tamaño es menor al de sus hermanos mayores, pero no es tan pequeño como para considerarse muy pequeño. Es mucho más fácil de usar con una sola mano, por lo que las personas activas o que usan transporte público pueden encontrar la mejor ergonomía.
Paradójicamente, el que tenga una pantalla plana, y no curva, permite que no haya toques involuntarios a los extremos de esta. Bueno, también los bordes son un poco más gruesos que los demás S10. Además, el diseño de su carcasa oficial es mucho más llamativo para quien no quiere un teléfono tan elegante o serio.
La desventaja de este equipo es la falta de un lente zoom. Pero, si puedes vivir con ello, puede ser una mejor opción que el S10 convencional, a un menor precio.
Imágenes: ENTER.CO.
