Esta semana Sony realizó una reunión con los desarrolladores de juegos para VR. El objetivo era sencillo: presentar un anticipo de la próxima generación de PlayStation VR (PlayStation VR) y corroborar algunos de los rumores que han circulado en los últimos meses. Y, si todo lo prometido por PlayStation es cierto, su próximo headset de realidad virtual parece incrementar bastante el atractivo de una PS5.
Comencemos por el nombre del headset. PlayStation todavía no lo ha llamado de manera oficial el PlayStation VR 2, sino que mantiene el nombre clave de NGVR (Next Gen VR o VR de siguiente generación, en español). Dicho esto, Sony sí compartió información sobre la tecnología que incorporará para su funcionamiento. Los lentes utilizados serán pantallas OLED con una resolución individual de 2000 x 2040 por ojo, lo que se traduce en una resolución total de 4K HDR. También incrementa un poco el ángulo de visión, que será de 110 de grados.
Pero quizás el punto más impresionante está en la aplicación de tecnología de seguimiento de ojos y Foveated Rendering. La primera permitirá que el dispositivo pueda identificar a dónde estás mirando en la pantalla. En teoría, esto puede permitir que los juegas generen acciones o activen comandos dependiendo de si estás mirando a un NPC o a un objeto de misión, por ejemplo. Luego está el Foveated Rendering, que de manera sencilla permite que la GPU dedique recursos extra a ese espacio que estás mirando. Lo que esto significa es que la próxima generación de VR podrá crear escenarios más realistas al enfocar sus recursos en las áreas que el ojo está captando, mientras que no exige mayor poder de la GPU.
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También se comprobaron los rumores que apuntaban a tener controles hápticos dentro del mismo headset. De acuerdo con Sony, esto mejoraría la experiencia al momento de jugar, al mismo tiempo que reducirá el motion sickness.
Los controles también fueron parte de la presentación y, aunque tampoco tenemos nombres oficiales, se entregaron algunos datos sobre lo que traerán. Ambos controles vendrán con el headset y traerán algunas de las cosas que ya vimos con los dualsense de la PS5. Tenemos gatillos adaptativos (que incrementan o reducen la presión dependiendo del juego) y ahora también vendrán sensores de tacto para los botones, que de acuerdo con Sony podrán detectar qué tan lejos están los dedos de los botones.
Tampoco se habló de retro compatibilidad, aunque sí se aseguró que Sony buscará remasterizar muchos de los títulos de laPlayStation VR 1 con la próxima generación.
Por desgracia, la próxima generación de PlayStation VR seguirá siendo alámbrica. Un cable USB C tendrá que ser conectado del headset a la PS5, lo que para muchos será un factor al momento de compararlo con Oculus Quest 2. Por supuesto, a diferencia de Oculus no es necesario contar con una cuenta de Facebook para usarlo… así que puntos para el PlayStation VR, después de todo.
Imágenes: Sony
