Una investigación reveló que el consumo de marihuana durante el embarazo tiene el mayor impacto en el crecimiento fetal, afectando el peso del recién nacido y la circunferencia de la cabeza.
El estudio que fue realizado por la Facultad de Medicina de la Universidad Central de Michigan, Estados Unidos y publicado por Frontiers, la tercera editorial de investigación científica más citada y la sexta más grande en el mundo, señala que “los parámetros de tamaño pueden verse afectados de manera diferente, ya que el peso parece reducirse un poco por la exposición a la marihuana, incluso si solo ocurre al principio de la gestación, mientras que la reducción de la circunferencia de la cabeza se predijo solo cuando la exposición continuó durante el segundo trimestre”.
De acuerdo con la investigación, la mayor parte del aumento de peso y crecimiento fetal ocurre en el tercer trimestre con una velocidad estimada de peso fetal que se acelera durante el embarazo y alcanza su punto máximo a las 35 semanas de gestación.
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Esta sería una de las razones de los investigadores para que se generen los déficits de mayor tamaño relacionados con la exposición tardía del embarazo, en comparación con la exposición temprana del embarazo.
Por otro lado, sobre la longitud de la cabeza al nacer no fue predicha por la exposición a la marihuana en este estudio, “pero se produjo un déficit potencialmente significativo desde el punto de vista clínico de casi un centímetro después de la exposición durante la gestación, un hallazgo que se acercó pero no alcanzó la significación estadística”.
Los investigadores de la Universidad Central de Michigan, explica que los hallazgos durante el estudio son consistentes con investigaciones previas que encontraron diferencias significativas en el peso al nacer y la circunferencia de la cabeza, pero no en la longitud al nacer, según el consumo de marihuana durante el embarazo.
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Cabe explicar que el bajo peso al nacer y la disminución del perímetro cefálico están “asociados con problemas neurológicos y psicológicos, complicaciones de salud en la niñez y el desarrollo de diversas enfermedades no transmisibles en la edad adulta”.
La investigación se realizó con mujeres que recibían atención prenatal en un consultorio obstétrico académico que incluía pacientes tanto del área urbana inmediata como de la región rural circundante más grande.
El estudio fue aprobado por la Junta de Revisión Institucional del hospital afiliado. Inicialmente, las pacientes eran elegibles para la inclusión en el estudio si tenían un embarazo único, tenían al menos 17 años de edad y habían dado a luz durante la ventana de cinco años del estudio (2016-2020).
Los pacientes que cumplían con estos criterios se identificaron mediante una búsqueda automatizada de los registros médicos electrónicos, que resultó en una lista de 1.738 mujeres que ingresaron a la atención prenatal durante el período de estudio.
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Luego, se revisaron manualmente los registros médicos de estas mujeres en busca de información relacionada con el uso de sustancias durante el embarazo, y después de una depuración y clasificación, la muestra final para el estudio fue 519 mujeres.
Los investigadores comentaron que si bien es cierto que el estudio estableció hallazgos significativos de los efectos de la marihuana en ciertos parámetros de crecimiento según el momento de uso; no fue posible encontrar un método para medir o comparar la cantidad total de sustancia que se consumía.
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Sin embargo, los científicos concluyeron que “el consumo de marihuana a lo largo de la gestación predijo déficits significativos en el peso al nacer y el perímetro cefálico al momento del parto. El uso de marihuana durante el primer trimestre resultó en déficits significativos en el peso del recién nacido, con tendencias a la baja que no fueron estadísticamente significativas para otros parámetros de crecimiento”
Así mismo, “el uso de marihuana durante el segundo trimestre también tuvo tendencias a la baja para todos los parámetros, con un impacto estadísticamente significativo en la circunferencia de la cabeza. Si bien no hubo efectos estadísticamente significativos sobre la longitud al nacer, las tendencias a la baja relacionadas con la exposición continua a la marihuana pueden sugerir hallazgos clínicamente significativos”.
Imagen: HighGradeRoots
