Uno de los rostros más odiados y polémicos del mundo de los videojuegos finalmente dirá adiós a su puesto como CEO de Activision Blizzard. A través de un memorando de Microsoft se anunció que Bobby Kotick dejará la compañía el próximo 29 de diciembre.
“Me gustaría agradecer a Bobby por sus invaluables contribuciones a esta industria, su asociación para cerrar la adquisición de Activision Blizzard y su colaboración después del cierre, y le deseo a él y a su familia lo mejor en su próximo capítulo“, lee el memorando que Phill Spencer, CEO de Microsoft Gaming, escribió confirmando la salida de Kotik de la compañía.
Por supuesto, aquellos que están alegres por su salida del puesto de CEO quizás estén un poco menos alegres de saber que, debido a su contrato, el CEO de Activision Blizzard al parecer está saliendo de la empresa con un paquete de pagos cercano a los $400 millones de dólares.
De acuerdo a fuentes cercanas con Xbox, por ahora la compañía no tiene un plan para reemplazar a Kotick en su puesto como CEO de Activision Blizzard. Por ahora Microsoft está ubicando a Matt Booty, ejecutivo de Microsoft, como la persona a la que deben reportar los empleados de Activision Blizzard.
Adiós Bobby Kotick: no te extrañaremos
El tono antagonista de esta noticia tiene sentido para cualquier persona dentro del mundo de los videojuegos. Bobby Kotick asumió el puesto de CEO de Activision Blizzard en 1991. Desde entonces ha ocupado esta posición, incluso después de múltiples polémicas.
El principal problema que la mayoría de jugadores parecen tener con el CEO de Activision Blizzard parece estar en la manera en la que ve el negocio de los videojuegos. A través de diferentes entrevistas Kotick dejó claro que su principal objetivo era el hacer cada uno de los videojuegos lo más rentables posibles. Por supuesto, querer que un videojuego entregue ganancias no es algo que sea necesariamente malo… el problema está en el hecho de que cada una de estas estrategias incluía el incrementar el costo de juegos reduciendo contenido, agresivas estrategias de monetización e incluso (y quizás uno de los eventos por los que más odio ha recibido) el apostar por recortes de empleados cuando él recibe una de las mayores tajadas en sueldos y bonos de la industria.
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Kotick también es infame por ser parte de todo el fiasco que fue las demandas y denuncias por acoso en ‘Activision Blizzard’. A pesar de que múltiples testimonios confirmaban que el CEO de la compañía tenía conocimiento de muchas de las quejas que se habían acumulado con el paso de los años. Quizás uno de los eventos más olvidados fue cuando se publicó una carta en la que se le pedía a los empleados de Activision Blizzard “no hablar de estos eventos pues podían causar un daño irremediable a la empresa”. Aunque originalmente el memorando fue firmado a nombre de uno de los ejecutivos del estudio, luego un reporte de The Wall Street Journal confirmó que la carta había sido escrita por él.
Más importante, el mismo reporte encontró que Kotick había sido clave en evitar el despido de algunos de los nombres más comunes (e importantes) en las denuncias de acoso sexual dentro de la compañía.
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