En un mundo donde la igualdad de género se perfila como un ideal cada vez más alcanzable, el sector de la Tecnología de la Información (TI) en Colombia, y por extensión en Latinoamérica, enfrenta todavía un desafío monumental. A pesar de los progresos logrados, la disparidad entre hombres y mujeres en términos de oportunidades laborales, remuneración y representación en posiciones de liderazgo sigue siendo palpable.El reciente informe de la OBS Business School, liderado por la profesora Marta Grañó, arroja luz sobre esta problemática en el contexto del avance imparable de la Inteligencia Artificial (IA). La brecha de género no solo persiste sino que corre el riesgo de ampliarse si no se toman medidas concretas para asegurar una representación equitativa en el desarrollo y aplicación de estas tecnologías emergentes.La IA emerge como un doble filo en esta lucha. Por un lado, tiene el potencial de transformar industrias y sociedades, pero por otro, puede perpetuar y amplificar los estereotipos de género existentes si no se promueve una participación equitativa en su desarrollo. El informe de OBS subraya la importancia de fomentar el talento femenino desde edades tempranas, destacar los logros de las mujeres en el sector y conectar a las jóvenes con modelos a seguir a través de programas de mentoring y becas específicas.
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A nivel empresarial, compañías como Keyrus están liderando el cambio hacia una mayor inclusión, donde incrementaron la contratación de talento femenino del 25% al 35% en los últimos años. Estas iniciativas, junto a campañas de sensibilización y una cultura empresarial que promueva el equilibrio entre la vida profesional y personal, son cruciales para avanzar hacia la igualdad de género en el sector TI.El futuro se presenta alentador, con un incremento notable en la participación femenina en roles tecnológicos y de liderazgo. Sin embargo, queda mucho camino por recorrer para cerrar la brecha salarial y aumentar la representación femenina en las altas gerencias. La colaboración entre empresas, instituciones educativas y políticas gubernamentales será clave para construir una industria TI más inclusiva y diversa, capaz de liderar la próxima ola de innovaciones tecnológicas de manera justa y equitativa.Imagen: Annie Spratt
