Por primera vez en Reino Unido un grupo de cirujanos utilizó una proyección 3D durante una operación. Como si estuvieran sentados frente a una pantalla de cine y para dar inicio a su primera misión, los médicos se pusieron unas gafas especiales que les permitieron observar las imágenes de la operación en tres dimensiones.
Aunque no se trata de una novedad, pues esta escena se ha repetido 14 veces en un hospital de Barcelona que lleva desde diciembre pasado ensayando una nueva técnica con laparoscopia, nombre bajo el que se conoce este tipo de cirugía, que transmite imágenes tridimensionales en alta definición.
“La tecnología 3D abre la puerta a nuevos abordajes menos agresivos para la cirugía”, aseguró Antonio de Lacy, el jefe del servicio de cirugía gastrointestinal de dicha institución médica de Barcelona.
En esta oportunidad, los médicos de Reino Unido decidieron probar la tecnología en una cirugía realizada a John Green, un hombre de 62 años al que tenían que quitarle la próstata. Durante la operación los cirujanos también utilizaron un brazo mecánico que permitió mejorar la movilidad y aumentó la precisión, lo que redujo el riesgo de dañar músculos o nervios durante la intervención.
Además de brindar grandes éxitos en la precisión, Dan Burke, el médico encargado de dirigir la operación asegura que esta tecnología ayuda a reducir la fatiga del cirujano, lo que significa que sería capaz de llevar a cabo “más operaciones con resultados aún mejores”.
“Ya estamos entusiasmados con el potencial que tiene esta tecnología, no sólo para nosotros sino para nuestros colegas en la confianza de hacer la cirugía mínimamente invasiva”, comentó Burke.
Según informa el diario El País de España, la novedad de la laparoscopia, consiste en el uso de unas gafas que permiten al cirujano ver las imágenes que retransmite la pantalla en tres dimensiones, lo que facilita el operar sin tener que mover la cámara constantemente.
Aunque la tecnología 3D en las operaciones pueda ofrecer bastantes beneficios a la medicina y una reducción de costos para algunas intervenciones quirúrgicas, el grupo de cirujanos del Reino Unido confirmó que por el momento se usará en un número reducido de pacientes.