El reciente anuncio del Consejo Nacional Electoral (CNE) de investigar al presidente Gustavo Petro por presuntas violaciones de los topes de campaña en las elecciones de 2022 ha generado preguntas sobre las posibles consecuencias para su mandato. El proceso es largo y complicado, y aunque la destitución del presidente no es inmediata ni sencilla, no es un escenario completamente descartable.
Procedimiento a seguir
El caso inicia con la investigación del CNE, que es la entidad encargada de revisar si la campaña presidencial de Petro excedió los límites permitidos de gastos. Según informes, la campaña del Pacto Histórico podría haber superado los topes en más de 5.300 millones de pesos, con aportes no reportados, como el de Fecode y gastos de transporte aéreo y publicidad. Si el CNE encuentra pruebas suficientes de que hubo irregularidades, debe enviar el caso a la Comisión de Acusaciones de la Cámara de Representantes. Esta comisión es la que se encarga de investigar y decidir si hay motivos para llevar el caso al Senado, donde se haría un juicio político.
La Comisión de Acusaciones de la Cámara es la única entidad con facultades para investigar y acusar al presidente. Si se encontrara que Petro tuvo conocimiento de estas irregularidades, la Comisión podría remitir el caso al Senado, que se encargaría del juicio político. Sin embargo, solo una decisión del Senado y una eventual condena por parte de la Corte Suprema de Justicia podrían llevar a la destitución del presidente Gustavo Petro.
El camino para un juicio político es complejo y, hasta la fecha, ningún presidente colombiano ha sido destituido por este motivo. El caso más cercano fue el de Ernesto Samper, investigado por financiamiento irregular en su campaña, pero finalmente no fue destituido.
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¿Es probable la destitución del presidente?
Aunque el artículo 109 de la Constitución sanciona la violación de los topes de campaña con la pérdida del cargo, los expertos legales señalan que este artículo tiene vacíos importantes. El 109 no menciona específicamente al presidente y suele aplicarse más a congresistas y gobernadores. Además, el proceso político para destituir a un presidente requiere no solo de pruebas contundentes, sino también de un consenso político, lo cual no es común.
Petro, por su parte, ha calificado la investigación como parte de un “golpe de Estado”, sugiriendo que las acciones del CNE y otras entidades buscan desestabilizar su gobierno. En un comentario en su cuenta en X (anteriormente Twitter), mencionó: “inició el golpe de estado”.
Aunque la destitución de un presidente por exceder los gastos de campaña es técnicamente posible, es un proceso largo, con muchos obstáculos legales y políticos. Por ahora, la investigación sigue en curso y cualquier desenlace será a mediano o largo plazo.
Imagen: Nelson Cárdenas – Cancillería
