El reciente anuncio del presidente Gustavo Petro sobre el incremento del 9,54 % en el salario mínimo para 2025 tendrá un impacto significativo en diversos sectores de la economía colombiana. Esta medida no solo implica un ajuste salarial, sino también un aumento paralelo en muchos bienes y servicios vinculados al salario mínimo, lo que afectará directamente los presupuestos de los hogares.
Para 2024, se proyecta que la inflación continuará su descenso y cierre el año por debajo del 6% (5,9% según el Banco de la República y 5,5% según los analistas del mercado), con la canasta de bienes como uno de los principales factores responsables de esta disminución.
Servicios que aumentan con el salario mínimo
- Salud: Los copagos (cantidad de dinero que deben pagar los afiliados como parte del valor del servicio requerido) a las EPS, como consultas médicas generales, especializadas y algunos exámenes de laboratorio, aumentarán en proporción al salario mínimo.
- Transporte público: Las tarifas de transporte público en varias ciudades también se ajustarán con el alza del salario mínimo. Además, las multas de tránsito, que se calculan con base en el número de salarios mínimos, incrementarán en consecuencia.
- Servicios de trabajadores independientes: Profesionales como terapeutas, mecánicos, consultores y asesores, cuyos honorarios están ligados al salario mínimo, también verán un ajuste en sus tarifas.
- Pensión mínima y aportes voluntarios: Los aportes obligatorios a los fondos de pensiones, así como los pagos voluntarios al sistema de seguridad social, se actualizarán con el incremento del salario.
- Servicios judiciales y legales: Las tarifas de los trámites notariales y algunos servicios legales se ajustarán de acuerdo con el aumento del salario mínimo.
Servicios que se ajustan con el IPC
Aparte de los aumentos derivados del salario mínimo, ciertos servicios y productos se ajustan según el IPC, que en 2023 cerró en 9,28%. Entre ellos se incluyen:
- Arriendos: Los alquileres de viviendas continúan indexados al IPC, lo que implica que cuando se renueven los contratos, las tarifas se ajustarán según el IPC más reciente.
- Servicios públicos: Las tarifas de agua, gas, energía y acueducto también se verán afectadas por el IPC. Sin embargo, algunos componentes de estas tarifas están regulados.
- Peajes: Los costos de peajes aumentarán debido a que, después de un congelamiento en 2023, se aplicará un ajuste por el IPC acumulado de los últimos dos años.
- Seguros y servicios médicos: El SOAT (Seguro Obligatorio de Accidentes de Tránsito) y algunos seguros médicos también experimentarán un incremento debido al ajuste del IPC.
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No todos los precios están sujetos a estos aumentos. Algunos productos y servicios están desvinculados del salario mínimo y del IPC. Entre ellos se incluyen:
- Arriendos de viviendas ocupadas por propietarios: Estos no están ligados ni al salario mínimo ni al IPC.
- Servicios de comunicación: Internet, televisión y telefonía no se ajustan con el salario mínimo ni con el IPC.
- Paquetes turísticos y transporte aéreo: Aunque los costos de transporte público aumentan, los pasajes aéreos y los paquetes turísticos no están directamente vinculados al salario mínimo ni al IPC.
- Alimentos en establecimientos y servicios domésticos: Estos productos y servicios no verán ajustes ligados al salario mínimo, aunque pueden verse impactados por la inflación.
El Gobierno ha trabajado durante años en desvincular ciertos costos del salario mínimo para evitar aumentos desmedidos que afecten la capacidad adquisitiva de los hogares colombianos. En 2025, se espera que algunos productos y servicios, como ciertas multas de tránsito y trámites legales, se desvinculen de este indicador. Aunque ya se han excluido más de 100 productos, aún quedan 88, incluyendo costos asociados a servicios judiciales y sanciones vehiculares. Este proceso de desindexación tiene como objetivo mitigar el impacto de los aumentos automáticos, protegiendo especialmente a los hogares de menores ingresos.
Imagen:Jay Wennington