Mauricio Jaramillo Marín
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El viernes pasado, Colombia entró en el grupo de los primeros 45 países del mundo en los que se ofrece el iPhone 3G, uno de los productos tecnológicos del año. Movistar y Comcel parecieron contagiados por el famoso secretismo de Apple: solo el 22 de agosto revelaron públicamente los precios del teléfono y las tarifas con las que sería ofrecido en el país.
EL TIEMPO logró conocer con antelación los precios mínimos a los que el iPhone 3G, en sus versiones de 8 y 16 GB, sería vendido por Movistar, pero los planes no podían ser difundidos previamente.
Pese al poco tiempo que tuvieron los operadores para generar expectativa alrededor del teléfono, hubo una buena acogida inicial, aunque lejana a las multitudinarias filas que se presentaron en Nueva York, Tokio, San Francisco y otras ciudades del mundo. El operador recibió en su sitio web alrededor de 15.000 preinscripciones de personas interesadas en el dispositivo, y abrió las puertas de diez de sus almacenes más la tienda iStore, el distribuidor premium de Apple en Colombia, a la medianoche del jueves.
En la mayoría de ellas hubo filas de más de 20 personas que pacientemente debieron esperar varias horas mientras el operador activaba sus teléfonos. En un sondeo con algunas tiendas de Movistar y con la iStore, EL TIEMPO estableció que en promedio se vendieron 30 iPhones 3G a nuevos clientes del operador, mientras que otros 50 fueron entregados en reposición (remplazo de otros teléfonos).
Análisis de los planes
Ambos operadores, siguiendo la tendencia en los países donde se ofrece el iPhone, ofrecen tres planes con diferentes precios, cantidad de minutos incluidos y capacidad de transmisión de datos al mes (medidos en megabytes), para establecer la conexión a Internet.
Para establecer qué tan costoso o económico puede salir el iPhone 3G para los colombianos, un buen punto de referencia es lo que muchos invirtieron para tener un iPhone original en el país: debían comprarlo en Estados Unidos o a revendedores no autorizados en Colombia por un valor cercano a un millón de pesos; luego, desbloquearlo o contratar a alguien que hiciera esta tarea, algo por lo que inicialmente se llegó a cobrar 150.000 pesos; y, para aprovecharlo al máximo, se debía pagar por un plan de voz y datos, algo que podía costar unos 130.000 pesos mensuales.
Pese a estos costos, los usuarios no podían contar con soporte técnico y varias de las funciones del equipo no servían o presentaban fallas, pues no estaba optimizado para las redes de los operadores nacionales.
Ahora, el iPhone 3G de 8 GB (la misma capacidad del original) se puede adquirir entre 183.467 y 1’128.251, según el plan y el operador, y los planes van desde los 74.900 hasta los 278.900 pesos.
Con el plan intermedio de Movistar costará en un año, sumando el costo del teléfono y el de las cuotas mensuales, 2’494.730 pesos. El iPhone original, con planes de voz y datos similares, podía costar aproximadamente 2’900.000.
Otro punto de referencia, aunque en un mercado distinto, es el del operador exclusivo del iPhone 3G en Estados Unidos, AT&T. Allí, el modelo de 8 GB de capacidad vale el equivalente a 370.000 pesos, y su plan más económico, que incluye 450 minutos, 5.000 minutos nocturnos y en fines de semana, un plan de datos ilimitado, cuesta cerca de 130.000 pesos (con 200 mensajes de texto, vale unos 10.000 pesos más).
¿Qué operador ofrece más?
La gran fortaleza de Comcel es su red 3G, que les permite a los usuarios del teléfono de Apple navegar y utilizar las distintas aplicaciones de la Red a máxima velocidad (entre 700 Kbps y 1,4 Mbps). Por su parte, Movistar solo podrá ofrecer la conexión a Internet con su red de tecnología Edge (equivalente a 2,5G), lo que significa que la conexión a la Red será entre cinco y diez veces más lenta.
Al respecto, Sergio Regueros, presidente de Movistar, le dijo a EL TIEMPO que esto será por pocos meses, ya que el primero de diciembre su red de tercera generación estará funcionando, y los actuales usuarios del teléfono de Apple serán actualizados a 3G sin ningún costo adicional.
En cuanto a los planes, los dos operadores tomaron caminos distintos en la confección de ellos. Mientras Movistar optó por el equilibrio en minutos y datos, tarifas mensuales y precios del equipo, Comcel fue mucho más agresivo en los precios del iPhone y en el valor de los planes, pero fue ‘tacaño’ con los minutos y los datos.
Un botón para la muestra es el de los planes intermedios de cada operador. El de Movistar ronda los 150.000 pesos y el de Comcel, los 105.000 pesos, y los precios del equipo, en su versión de 8 GB, están en 695.000 y 392.000 pesos respectivamente. En voz y mensajes de texto, ambos planes están relativamente parejos: mientras el primero incluye 800 minutos a líneas propias o de teléfonos fijos, o 300 a otros operadores, Comcel ofrece 300 minutos a cualquier destino; Movistar ofrece 200 mensajes de texto, frente a 150 de Comcel.
Pero es en el tema de datos donde está la mayor diferencia: Movistar incluye 500 MB frente a 150 MB de Comcel. Esta diferencia es fundamental, pues las estadísticas de uso internacionales señalan que los usuarios del iPhone 3G son los que más utilizan los servicios de Internet, pues este dispositivo muestra videos de YouTube, sitios web con todas sus imágenes, correo electrónico con anexos y permite bajar software de la tienda de aplicaciones App Store.
En cuanto a los datos, hay otra diferencia clave: el valor de los megabytes adicionales al plan, que en Movistar está entre 1.000 y 1.600 pesos, mientras que en Comcel es de 8.000 pesos. Esto significa que en estos planes intermedios, si un usuario de Movistar consume 525 MB, deberá pagar 35.000 pesos por los 25 MB adicionales; entre tanto, si un cliente de Comcel transmite 175 MB, deberá pagar, por los mismos 25 MB adicionales, la suma de 200.000 pesos.
Con el alto consumo de datos que puede generar el iPhone 3G, los usuarios de Comcel podrían recibir desagradables sorpresas en su facturación mensual. Por ello, el operador ofrece un paquete de datos ilimitado, que vale 100.900 pesos y que se suma al plan escogido. Pero en caso de adquirir ese paquete, los usuarios de Comcel terminarán pagando más que los de Movistar y con menos minutos incluidos.
La recomendación para quienes quieren a toda costa adquirir un iPhone 3G sin importar el operador o para quienes están escogiendo plan con su operador actual es que calculen primero cuántos minutos hablan en promedio al mes, y qué tanto podrán conectarse a Internet por medio de conexiones Wi-Fi.
Si no necesitan muchos minutos y tienen conexión inalámbrica en sus casas y oficinas, probablemente los planes de Comcel les resulten más convenientes y el dispositivo les salga más barato. En cambio, si piensan conectarse a Internet permanentemente y utilizar aplicaciones de alto consumo de datos, como YouTube, Movistar podría ser la mejor alternativa, a pesar de que el teléfono salga un poco más costoso.
Algunas pistas del mercado
Durante el lanzamiento del dispositivo por parte de los dos operadores, y sus primeras horas en las tiendas del país, se encontraron algunas pistas de cómo se comportará el teléfono:
– Reposición: los operadores tienen fórmulas complejas para definir el precio del iPhone 3G para sus clientes actuales de otros teléfonos. Sin embargo, en su primer día se entregaron más iPhones 3G por reposición que a clientes nuevos (la proporción, según un sondeo realizado en varias tiendas en el primer día, fue de 50 por reposición y 30 a clientes nuevos).
– Mercado de empresas: aunque Steve Jobs, presidente de Apple, hizo énfasis en que el iPhone 3G es un ‘animal corporativo’, en capacidad de competir allí fuertemente, la sensación al hablar con representantes de los operadores es que su foco será el usuario final y no le tienen mucha fe en ese terreno.
– En próximos meses Comcel podría ofrecer televisión en el iPhone 3G (y otros teléfonos), gracias a que la firma inglesa Rok TV firmó un acuerdo con América Móvil, casa matriz de Comcel.
– Los operadores no descartan, para el mediano plazo, la oferta del teléfono con planes prepago.
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