La teoría de que utilizar un dispositivo manos libres para hablar por teléfono celular mientras se maneja un automóvil es más seguro que no usarlo está siendo revaluada en varios estudios científicos. El nivel de distracción al hablar ¿que al final es lo que reduce la concentración y la capacidad de reacción de los conductores¿ parece ser el mismo con o sin el aparatito.
Así lo sostienen investigadores del George Institute for International Health de la Universidad de Sydney y del Injury Research Centre de la Universidad de Australia Occidental; también del Insurance Institute for Highway Safety de Arlington y de la Universidad de Utah (Estados Unidos). Yo les creo, porque en muchas ocasiones he sido cerrado, bloqueado, agredido y asustado por conductores que hablan a velocidades que oscilan entre los 20 y lo 80 kilómetros por hora (o más).
Lo que definitivamente no creo es que ver televisión mientras se maneja sea más seguro que hablar por celular, con o sin manos libres. Por eso, no entiendo cómo es que ahora hay tanto irresponsable que exhibe una pantalla de video en el panel frontal de su vehículo, y la lleva encendida mientras recorre las calles de la ciudad a alta velocidad.
Estoy seguro de que son pantallas de video y no sistemas de posicionamiento global o dispositivos de seguridad, de esos que le muestran al conductor quién viene detrás, porque en los últimos meses he alcanzado en los semáforos a varias ráfagas que me han sobrepasado mientras ven televisión o películas. Cuando freno a su lado, las imágenes que veo no son precisamente mapas o carros que los siguen.
Un sistema de video en el asiento de atrás, para que los pasajeros no se aburran durante un trayecto largo, está bien. Hace poco vi la publicidad de una marca de vehículos que regala la pantalla y un DVD por la compra de uno de sus modelos, pero aclara que estos solo funcionan cuando el vehículo está detenido. Eso también está bien. Pero un monitor en el panel frontal (empotrado en el tablero o debajo del espejo) es un despropósito en materia de seguridad automovilística, disfrazado como un gran adelanto tecnológico.
¿Dice algo al respecto el Código de Tránsito? ¿Dice algo de esos bárbaros que manejan un equipo de sonido con ruedas, cuya carga de decibeles seguramente no les permite ningún tipo de interacción auditiva con el entorno, tan importante para evitar accidentes?
Cinturones de seguridad en todos los asientos, bolsas de aire, dirección y frenos inteligentes¿ los fabricantes de automóviles no saben qué más inventarse para hacer vehículos cada vez más seguros. Pero luego, los genios de los accesorios y los conductores irresponsables se las ingenian para buscarse dolores de cabeza: hablan por celular, se quedan sordos con el ruido del equipo de sonido o se dedican a ver televisión mientras manejan.
En una entrevista publicada en EL TIEMPO el 18 de agosto pasado, el secretario de Tránsito de Bogotá, Carlos Eduardo Mendoza, dijo que la mayoría de los 20.343 siniestros ocurridos durante el primer semestre de este año (en los que murieron 283 personas) fueron consecuencia de ¿errores humanos que pueden evitarse¿. Supongo que las conductas que describo en el párrafo anterior clasifiquen como errores humanos. Y quienes las cometen, también.
Un televisor, un equipo de sonido ensordecedor o un teléfono mal utilizado entre el carro pueden dar mucho caché, pero seguramente no pueden borrar una estrella negra¿ recuerde los avisos en las carreteras: su familia lo espera¿ y a los que manejan por la misma calle que usted, también.
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