“Si Elon Musk compra Twitter, cierro mi cuenta” es el nuevo “si cualquier candidato radicalmente diferente a mí, gana la presidencia, me voy del país”. El público de la red social está dividido entre quienes se burlan de la paranoia de muchos respecto a lo que pueda cambiar dentro de los debates que se dan dentro de la plataforma, entre los que son indiferentes al negocio, y entre quienes están preocupados porque la compra hecha por el magnate desemboque en una horda de odio sin filtro, en donde cualquier opinión discriminatoria pueda ser válida dentro de lo que puede entenderse como “libertad de expresión”.
Elon Musk sabe que no todos (ni siquiera en Twitter) están felices con su nueva adquisición y por eso, ayer invitó a sus detractores a quedarse en la plataforma y los alentó a que, si así lo deseaban, expresaran su molestia en la red social incluso, pues “de eso también se trata la libertad”.
Sin embargo, si después de pensarlo has decidido desactivar tu cuenta e irte de Twitter, te recomendamos tres aplicaciones que pueden ser la alternativa a la plataforma fundada por Jack Dorsey.
Mastodon
Mastodon es una red social descentralizada, de código abierto y sin publicidad, que nació como respuesta a Twitter. De acuerdo a su creador, Eugen Rochko, Mastodon ha visto un aumento considerable de usuarios desde que iniciaron las noticias sobre una posible oferta de Musk para hacerse con la plataforma, logrando alcanzar los cuatro millones de usuarios.
Esta red social no está gestionada por un solo individuo o por una empresa. Según Unocero, sus comunidades son gestionadas por los propios usuarios, quienes moderan comunidades que dentro de la aplicación son conocidas como «Instancias».
Mastodon: The social network that Elon Musk does not own 9.2% of (we are a non-profit)
— Mastodon (@joinmastodon) April 5, 2022
Así como sucede en Twitter, los miembros pueden acceder a cada una de esas instancias, seguir a otros usuarios y compartir mensajes con un límite de 500 caracteres siempre y cuando sigan los parámetros de moderación de contenido, para evitar comportamientos abusivos.
Un punto importante es que esta alternativa no está controlada por una persona, organización o empresa; sus comunidades son gestionadas por los propios usuarios quienes crean «su propia versión» de Mastodon, mediante comunidades conocidas como «Instancias», las cuales son gestionadas única y exclusivamente por sus creadores.
De la misma manera que sucede en Twitter, los usuarios pueden acceder a cada una de estas comunidades, seguir a otros usuarios y compartir mensajes con límite de 500 caracteres cuidados con herramientas para evitar situaciones de acoso o abuso.
Otras alternativas a Twitter
Además de Mastodon, existen más aplicaciones que funcionan bajo un formato de ‘microblogging’ muy similar a Twitter (como GETTR). Sin embargo, varias de ellas pueden servir como fuente de desinformación debido a la poca moderación que tienen. Dentro de estas redes se encuentran Parler y Truth Social: la plataforma creada por Donald Trump, quien por cierto, ya desechó la idea de regresar a Twitter.
Imágenes: Captura de pantalla