¿Creen que la privacidad no importa? Imaginen, por un momento, que el desastre de Ashley Madison no hubiera ocurrido en Ashley Madison, sino en Tinder, o Snapchat. Muchos de ustedes estarían corriendo en círculos, hiperventilando y muertos del pánico. Sus historiales, fotos, chats o quién sabe qué más, estarían por ahí dando vueltas.
Imaginen que se confirmara que las autoridades colombianas hacen vigilancia masiva. Que se supiera más allá de cualquier duda que la Policía guarda datos de todos los usuarios de internet en nuestro país. Que, para convertirse en blanco de espionaje, bastara con una búsqueda inoportuna, o con entrar a un sitio que esté en una lista ‘negra’ armada de cualquier manera.
Muchos actores, desde los hackers inquisidores hasta los gobiernos del mundo, tienen el ojo encima sobre todo lo que hacemos en internet, y están esperando cualquier oportunidad para husmear. Ya estamos muy viejos como para hacernos los ingenuos: la protección al 100% es imposible en seguridad informática.
Vivimos en un mundo en el que casi que cada tecleo que hacemos en nuestros dispositivos es el primer eslabón de una cadena que le da la vuelta al mundo y pasa por varios servicios antes de que el resultado esté de vuelta en nuestra pantalla. Asumir que todos esos eslabones hacen lo máximo para proteger nuestra seguridad y privacidad es, simplemente, engañarse a uno mismo.
Nuestra vida íntima ocurre en internet
La privacidad en línea es importante porque hoy buena parte de nuestra vida íntima, esa de la que nadie más tiene derecho a saber, ocurre en internet. Cuando tomamos decisiones, lo hacemos en la red: allí consultamos, discutimos, nos ‘inspiramos’. Si estamos pensando en hacer algo importante –algo que quizás preferiríamos mantener en secreto–, muchas de las voces que se debaten en nuestra cabeza son las cosas que leemos en la web, o que nos dicen nuestros amigos en un chat.
Defender el derecho a la privacidad es, al final, defender la intimidad. Es tanto como pedir que nadie se meta en tu habitación, o que nadie abra tus cortinas. Se trata de luchar porque ese espacio ‘propio’ que ocupamos todos en internet siga existiendo.
El dilema
Esto nos deja ante dos alternativas igualmente malas. O renunciamos a internet para proteger nuestra privacidad y hacemos nuestra vida muchísimo más complicada, o nos resignamos a que nuestros secretos ya no son secretos y a que alguien puede saber qué ocurre muy dentro de nuestras conciencias, donde nadie debería tener acceso.
Habrá quien opte por la ‘opción nuclear’, pero yo no. Las vidas de muchos de nosotros están demasiado conectadas. Desde nuestra información bancaria hasta las charlas con nuestros amigos, pasando por el trabajo y la vida amorosa de muchos, todo ocurre en internet.
O renunciamos a internet, o nos resignamos a que nuestros secretos ya no son secretos
Claro: cada cosa que hacemos en línea puede ser reemplazada por otra que cumpla la misma función y no esté en internet, pero nada reemplaza la comodidad y el poder de tenerlo todo así de cerca. No se puede comparar ir físicamente del banco a la oficina, luego de ahí a la biblioteca y desde ahí a la agencia de viajes; que pasar de la pestaña de la página del banco, a la del correo, luego a la de Google y después a Kayak en el navegador.
Entonces, ¿nos bajamos los pantalones? Hay soluciones intermedias. Algunos usan software libre y herramientas tecnológicas con las que buscan no depender de Google y Facebook. Pero lograr esto es difícil técnicamente, y no es viable esperar que se haga masivamente. Además, es inevitable entrar en algún punto en contacto con algún servicio, algún operador o algún servidor al que no le importa la privacidad.
La solución parece estar en medio de las dos cosas. Yo no la sé con certeza. Lo único que se me ocurre es que hay que empujar para que la privacidad de los usuarios sea más importante para todas las partes involucradas. Que los Facebook, los Google, los Tinder y los Ashley Madison hagan lo mejor posible para no perder la información que sus clientes les han confiado. Que la gente sepa lo mínimo sobre cómo proteger sus datos en línea y no esté por ahí vulnerable, con contraseñas estúpidas y confianzas excesivas. Y que los gobiernos del mundo tengan muy clara la línea entre perseguir criminales y acosar civiles.
Imagen: Maksim Kabakou (vía Shutterstock).
“la protección al 100% es imposible en seguridad informática.”!!eso es lo que llevo años diciendo!!! y eso de que las empresas protegen nuestra privacidad es cuento chino…lo mejor es usar las cosas para lo que están hechas y no andar publicando cosas privadas en la red y listo!!…no uso Facebook, ni tinder, ni twiter y esta cuenta la tengo vinculada a un mail que es solo para cosas de basura y solo me conecto desde un dispositivo fuera de la red de mi casa…y ese dispositivo no tiene ninguna clase de información personal o privada…aunque obviamente si se le queren meter a uno por algún lado encontraran por donde hacerlo, pero al menos no la dejo tan facil
Se va cada rato a un cafe internet a comentar? jajaja
Jajajjajaja noooo tengo dos servicios!!! Uno es para visitantes de mi casa y otro si es el mío de trabajo!!
Pues por lo de fuera de la red de la casa pense eso o que se colgaba a la red de un vecino jajaja
Jajajaja
Aunque pensándolo bien eso me saldría más barato….toca pensarlo…
“la protección al 100% es imposible en seguridad informática.”!!eso es lo que llevo años diciendo!!! y eso de que las empresas protegen nuestra privacidad es cuento chino…lo mejor es usar las cosas para lo que están hechas y no andar publicando cosas privadas en la red y listo!!…no uso Facebook, ni tinder, ni twiter y esta cuenta la tengo vinculada a un mail que es solo para cosas de basura y solo me conecto desde un dispositivo fuera de la red de mi casa…y ese dispositivo no tiene ninguna clase de información personal o privada…aunque obviamente si se le queren meter a uno por algún lado encontraran por donde hacerlo, pero al menos no la dejo tan facil
Se va cada rato a un cafe internet a comentar? jajaja
Jajajjajaja noooo tengo dos servicios!!! Uno es para visitantes de mi casa y otro si es el mío de trabajo!!
Pues por lo de fuera de la red de la casa pense eso o que se colgaba a la red de un vecino jajaja
Jajajaja
Aunque pensándolo bien eso me saldría más barato….toca pensarlo…
En el artículo hay dos puntos de vista…… hackers robando información y entidades entregando información. El primero nunca va a desaparecer ya que siempre va a existir un usuario descuidado, una empresa que tenga políticas de seguridad obsoletas o un programador que cometa en error. El segundo punto de vista está en debate y es el que realmente vale la pena discutir. Sin embargo, no puede entrar a consideración dejar de usar Internet, xq simplemente no tiene sentido. El mundo actual necesita internet.
Google y Facebook son servicios muy seguros pero son obligados por el gobierno de estados unidos a entregar información cuando sea requerida y lo mismo aplica para cualquier otro servicio que corra en servidores dentro de ese país. Lo mismo ocurre en otros paises.
Los algoritmos y técnicas conocidas pueden garantizar la privacidad de nuestra información pero no es usado por los proveedores de servicios masivos actuales xq en algunos casos le complican la vida a los usuarios o algunas veces sencillamente no pueden. Por ejemplo, el gobierno de USA prohíbe usar criptografía mas a allá de cierto nivel en donde no sea posible descifrar la información. Y un servicio masivo que no abarque estados unidos está destinado a morir.
Ahora bien, el debate radica en que grupos terroristas pueden usar las comunicaciones actuales por ejemplo para organizar ataques…. Y los servicios de inteligencia necesitan ser capaces de analizar esa información para prevenirlos.
Yo estoy a favor de la privacidad y en fortalecer los algoritmos actuales. Pero los usuarios deben saber que cuando se confía un secreto a alguien mas, siempre existe la posibilidad de que el secreto se haga público.
En el artículo hay dos puntos de vista…… hackers robando información y entidades entregando información. El primero nunca va a desaparecer ya que siempre va a existir un usuario descuidado, una empresa que tenga políticas de seguridad obsoletas o un programador que cometa en error. El segundo punto de vista está en debate y es el que realmente vale la pena discutir. Sin embargo, no puede entrar a consideración dejar de usar Internet, xq simplemente no tiene sentido. El mundo actual necesita internet.
Google y Facebook son servicios muy seguros pero son obligados por el gobierno de estados unidos a entregar información cuando sea requerida y lo mismo aplica para cualquier otro servicio que corra en servidores dentro de ese país. Lo mismo ocurre en otros paises.
Los algoritmos y técnicas conocidas pueden garantizar la privacidad de nuestra información pero no es usado por los proveedores de servicios masivos actuales xq en algunos casos le complican la vida a los usuarios o algunas veces sencillamente no pueden. Por ejemplo, el gobierno de USA prohíbe usar criptografía mas a allá de cierto nivel en donde no sea posible descifrar la información. Y un servicio masivo que no abarque estados unidos está destinado a morir.
Ahora bien, el debate radica en que grupos terroristas pueden usar las comunicaciones actuales por ejemplo para organizar ataques…. Y los servicios de inteligencia necesitan ser capaces de analizar esa información para prevenirlos.
Yo estoy a favor de la privacidad y en fortalecer los algoritmos actuales. Pero los usuarios deben saber que cuando se confía un secreto a alguien mas, siempre existe la posibilidad de que el secreto se haga público.
Yo personalmente opino que la información personal no debería pasar por las redes sociales; no sabemos a dónde van nuestras fotos y nuestros comentarios. Yo personalmente Facebook hace años lo deje atrás y creo que no quiero volver. Me gusta opinar pero no regalar mi información personal y mucho menos decirle a Facebook dónde estoy frecuentando. Que disfruten las personas que son felices regalando su información.
Yo personalmente opino que la información personal no debería pasar por las redes sociales; no sabemos a dónde van nuestras fotos y nuestros comentarios. Yo personalmente Facebook hace años lo deje atrás y creo que no quiero volver. Me gusta opinar pero no regalar mi información personal y mucho menos decirle a Facebook dónde estoy frecuentando. Que disfruten las personas que son felices regalando su información.