Los smartphones guardan mucha información valiosa, pues contienen datos personales, fotografías y hasta ubicaciones. Es decir, quien tenga acceso a tu equipo podría saber mucho de tu vida privada.
Si miras a tu alrededor, es increíble la cantidad de gente que no usa medidas mínimas de seguridad como una contraseña, patrón o PIN (código de cuatro dígitos) para que personas no autorizadas no puedan entrar a ver sus datos. A continuación te daremos algunos consejos para tener un smartphone más seguro.
Pon una contraseña, huella, patrón o PIN
Una contraseña o alguna barrera de entrada a los datos harán tu smartphone más seguro. Imagina si pierdes o te roban el celular y este no tiene bloqueo; quien tenga tu equipo podrá acceder a él y a tus datos de manera muy sencilla. Una barrera de acceso, por más sencilla que sea, hará tu smartphone más seguro.
Configurar el bloqueo de pantalla en Android
Para configurar una forma de bloqueo debes ir a Configuración -> Seguridad -> Bloqueo de pantalla y elegir entre patrón, PIN, contraseña o huella digital (si tu equipo soporta huella digital). En caso de que escojas patrón, te recomendamos desactivar la visibilidad de este en el apartado de seguridad.
Por otro lado, configura tu equipo para que se bloquee automáticamente después de un tiempo mínimo. Para hacerlo, selecciona Configuración -> Seguridad -> Bloquear automáticamente y escoge el máximo de tiempo para bloquear el equipo después de que se haya suspendido la pantalla.
Configurar el bloqueo de pantalla en iPhone
En caso de que no hayas establecido el bloqueo de pantalla en iPhone, pues el sistema operativo es bastante insistente en esto cuando estás configurando por primera vez tu equipo, debes ir a Configuración -> Touch ID y código. Una vez allí podrás establecer o modificar tus preferencias de huellas, así como desactivar o cambiar el código de desbloqueo, que puede ser un PIN de cuatro o seis cifras, así como un código alfanumérico.
Cifra la información en tu equipo
Si tienes un equipo con Android 7.0 Nougat así como un iPhone con iOS 8 o superior, este estará cifrado por defecto. Desde Android 4.0 Ice Cream Sandwich existe esta opción, aunque voluntaria, que permite que nadie más que tú (o alguien que sepa tu contraseña) pueda acceder a los datos que existen en tu equipo, aunque utilice equipos y software externos. Así que si tienes un equipo Android con una versión menor a Android 7.0 Nougat deberías elegir la opción de cifrar tu dispositivo.
Cifrar tu equipo Android 6.0 o inferior
Para cifrar tu equipo Android debes ir a Configuración -> Seguridad -> Encriptar dispositivo. Al elegir esta opción debes tener cargado el equipo pues el procedimiento se demora cerca de una hora.
Después de cifrar los datos de tu equipo deberás siempre poner la contraseña, PIN o patrón de desbloqueo cada vez que apagues y enciendas tu equipo. Si olvidas tu contraseña deberás restaurar el equipo y perderás todos tus datos.
Mantén tu smartphone actualizado
Los dispositivos iOS compatibles con las más recientes versiones del sistema operativo se actualizan muy rápido. Así, los usuarios deben siempre permitir la actualización de su dispositivo, con el fin de mantener las últimas novedades pero también mantener su smartphone seguro.
En Android, aunque a veces no llegan tan rápido -o simplemente no llegan- las actualizaciones, los fabricantes sí liberan actualizaciones de seguridad que es necesario instalar tan pronto como estas llegan al equipo.
Solo instala aplicaciones de fuentes confiables
En iOS es fácil pues la App Store es la única fuente que puedes usar para instalar aplicaciones, a menos que hagas jailbreak a tu equipo. En Android es más sencillo instalar aplicaciones desde fuentes diferentes a las oficiales gracias a la opción de instalar aplicaciones desde fuentes de terceros. Aunque no todas las aplicaciones instaladas desde otros lugares que no sean las tiendas oficiales son malignas, te recomendamos que solo instales aplicaciones si de verdad confías en la fuente.
No transmitas datos sensibles en las Wi-Fi públicas
A veces es imposible no usar redes Wi-Fi públicas, pues puedes estar en otro país o tal vez se ha acabado tu plan de datos. Así, a menos de que sea estrictamente necesario, no transmitas datos privados, porque pueden ser leídos por un tercero de manera sencilla. Esto incluye información de tarjetas de crédito, fotos privadas, hacer log in en sitios que requieran contraseña, entre otros.
No creas en las cadenas que mandan por aplicaciones como WhatsApp
En varias oportunidades hemos hablado de ese tema. En WhatsApp y otras aplicaciones de mensajería instantánea es común que las personas transmitan mensajes de que van a cobrar por el servicio o que están regalando pasajes aéreos. En realidad, debes tratar este tema con esceptimismo y, de preferencia, nunca hacer clic en estos enlaces.
¿Tienes alguna otra recomendación? Te invitamos a compartirla en los comentarios.
Sobre todo esas cadenas de whatsapp