Una investigación realizada por Lorie Donelle, PhD, profesora de la Facultad de Enfermería de la Universidad de Carolina del Sur, señala que las mamás utilizan más las tecnologías digitales desde antes de la concepción, en la etapa de trabajo de parto o para ayudar a su bebé a dormir. ¿Por qué?Luego de la pandemia y con la llegada de cientos de aplicaciones y acceso a la información a través de diferentes canales de comunicación y las redes sociales; las madres han visto en las tecnologías digitales, una opción inmediata de ir consultando lo que están experimentando antes de convertirse en madres y luego de que ya lo son.Es decir, para las madres es más fácil recurrir a los buscadores para encontrar un tema en específico de su proceso y no ir al especialista o no socializar con mamás que ya han pasado por esta etapa. La investigadora Donelle explica que las futuras mamás quieren asegurarse de que sus experiencias sean “normales” y que estas no están por fuera de lo normal, esto con el fin de buscar soluciones y buscar ayuda. Sin embargo, pese a que las tecnologías digitales dan la oportunidad de buscar información al instante, muchas de ellas, durante el estudio manifestaron que les preocupaba que la información no fuera correcta y confiable.
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Las madres utilizaron, por ejemplo, las “tecnologías digitales para rastrear los ciclos menstruales antes de la concepción; monitorear, documentar y anunciar un embarazo durante la etapa prenatal; prepararse para el parto durante la etapa del trabajo de parto/nacimiento; y para ayudar a los bebés a dormir, documentar/anunciar su nacimiento y conectarse a recursos para padres durante la etapa posparto”. La investigadora revela que una de las ideas del estudio era entender si el auge de buscar información y utilizar aplicaciones “era algo normal”. Los expertos consultados por la profesora Donelle, argumentaron que esta “búsqueda continua de información es generada, en parte, por las normas sociales que prescriben que las mujeres sean madres con la presión de ser perfectas, lo que contribuye al costo del bienestar de las madres”.El estudio publicado en Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos, la más grande del mundo, también explica que “el uso de las tecnologías digitales por parte de los participantes en la transición a la crianza estuvo acompañado de sentimientos de negociación constante, de compensaciones entre la relativa facilidad y el acceso instantáneo para responder a la pregunta “¿Es esto normal?” con posibles desventajas, como la probabilidad de que la información sea inexacta o un juicio potencial”.
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Las principales tecnologías a las que recurrieron las mamás fueron plataformas en línea, aplicaciones, foros y servicios de transmisión para responder a esta incesante pregunta”. El documento también reseña que las madres tuvieron un impulso de buscar dicha información con el objetivo de controlar la fertilidad, buscar información sobre el desarrollo de su feto, prepararse para el trabajo de parto y el parto, y generar un sentido de comunidad durante posparto; quienes más buscaron esta información fueron las madres primerizas.
Tecnologías digitales una opción obligada por no tener acceso a la salud
La investigadora explica que los hallazgos “sugieren que las oportunidades para mejorar la autogestión y el empoderamiento pueden no ser equitativas. De acuerdo con los participantes de nuestro estudio, muchas personas se sienten obligadas a buscar información de salud en línea, especialmente cuando experimentan dificultades para acceder a los servicios de atención médica”. Antes esta situación, de hecho las preocupaciones de que si la información era verídica y confiable, pasaron a un segundo plano, ya que en el Internet podían encontrar inmediatez y “la conveniencia de la información digital”“Las madres minimizaron sus preocupaciones sobre la desinformación y las violaciones de la privacidad en busca de validación o dirección cuando la necesidad de información en respuesta a un problema de salud se percibía como apremiante”, señala Donelle. Para la investigación el equipo realizó un estudio descriptivo cualitativo para comprender las experiencias y los usos de la tecnología digital de los nuevos padres durante las cuatro etapas: prenatal, embarazo, trabajo de parto y posparto), en el suroeste de Ontario, Canadá. Realizaron grupos focales y entrevistas individuales en lugares acordados entre los participantes y los investigadores, incluidas bibliotecas públicas, un refugio y un centro infantil.La investigación reseña que este ejercicio proporcionó un análisis descriptivo de cómo las nuevas madres utilizan diferentes formas de tecnología digital a medida que hacen la transición para convertirse en padres primerizos”. Las mamás utilizaron una variedad de tecnologías en cada etapa de la transición, y los teléfonos inteligentes fueron omnipresentes en todas las etapas, pese a los reparos que surgieron en tanto a si lo que encontraban en internet era confiable.
Imagen: @suavinex_spain
