En Colombia hay más líneas móviles activas que habitantes; al cierre de 2024, se registraron más de 102,9 millones de líneas de voz y datos, una cifra que muestra un crecimiento del 6,4% frente al año anterior. El país vive un auge del acceso móvil, pero los desafíos estructurales en cobertura, acceso real a nuevas tecnologías y disparidades entre operadores aún limitan el potencial transformador del ecosistema digital.
El más reciente Data Flash de la Comisión de Regulación de Comunicaciones (CRC) muestra un panorama mixto. El crecimiento de la conectividad no se traduce de manera uniforme en ingresos ni en modernización tecnológica. Por ejemplo, aunque los ingresos por servicios móviles aumentaron un 5,96% y llegaron a $3,28 billones en el último trimestre, solo el 45,6% de las líneas generaron ingresos para los operadores. Más de la mitad de las líneas móviles en el país son prepago sin compra mensual. Es decir, líneas dormidas.
La consolidación del internet móvil como motor del sector es innegable: el 82,2% de los ingresos provienen de este servicio. Además, los accesos a internet móvil alcanzaron los 49,4 millones, creciendo un 2,8% frente a 2023.
Sin embargo, este avance tiene matices. A pesar del aumento en accesos, el ingreso promedio por línea de internet móvil fue de $18.525, con un crecimiento modesto del 2,4%. Al mismo tiempo, los usuarios accedieron a más datos, pero pagando casi lo mismo: el ingreso promedio por GB fue de $1.652, apenas 0,3% menos que el año anterior.
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Uno de los focos del informe es el avance de la tecnología 5G. A diciembre de 2024, Colombia contaba con 3,8 millones de accesos 5G, lo que representa el 7,7% del total de conexiones móviles. La cifra puede parecer alentadora, sobre todo porque creció un 79% en apenas seis meses. Pero aún estamos lejos de una masificación efectiva, pues la mayoría de los accesos siguen siendo 4G (84%), mientras que 2G y 3G siguen sin desaparecer del todo.
En términos de liderazgo en el despliegue de 5G, Claro mantiene la delantera con más del 50% de participación en líneas y accesos, incluyendo aquellas que generan ingresos. Tigo supera a Movistar en líneas que efectivamente monetizan, lo que habla de una estrategia comercial más eficiente. WOM, por su parte, aún no logra consolidarse como un competidor fuerte en términos de tráfico e ingresos, aunque aparece en las estadísticas de los operadores móviles de red (OMR).
Un dato revelador es que el tráfico móvil se multiplicó por 1,57 entre 2022 y 2024, alcanzando los 1,61 millones de terabytes. Este crecimiento ha sido impulsado, en buena parte, por el consumo de contenido en plataformas OTT como Meta, YouTube, TikTok y Netflix.
Solo Meta generó más de 226 mil TB en diciembre de 2024. Sin embargo, esta explosión de datos no se ve reflejada en el uso del servicio de voz: los minutos cursados cayeron 1,9% respecto al año anterior, confirmando el declive de la voz tradicional frente a la mensajería y llamadas vía apps.
Mientras los datos siguen ganando terreno, los mensajes SMS entre usuarios caen en picada (16% menos), aunque los mensajes a códigos cortos, especialmente los automatizados, crecieron más de 100%. Esto refleja una mayor interacción máquina-usuario, pero no necesariamente una mejor experiencia para los usuarios finales.
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El informe de la CRC deja claro que el país avanza en cobertura y consumo digital, pero con brechas importantes. La expansión de 5G es aún incipiente y altamente concentrada. Las tarifas bajan lentamente, pero el acceso real sigue siendo limitado para muchos.
La desconexión entre cantidad de líneas activas y líneas que generan ingresos también sugiere un mercado sobredimensionado, donde tener una SIM no equivale a estar conectado.
Colombia necesita no solo más cobertura, sino mejor calidad y mayor inclusión digital. La velocidad del 5G puede ser una promesa, pero aún es una meta lejana para la mayoría.
Imagen: Archivo ENTER.CO