Cada vez es más común que usuarios en Colombia noten un aumento en el valor de su plan móvil sin haber solicitado ningún cambio. Esto ha generado molestias, especialmente entre clientes de operadores como Movistar, Claro y ETB. Sin embargo, estos incrementos no son arbitrarios: responden a lo establecido por la ley y los contratos de servicio que aceptamos al adquirir un plan.
En el caso de Movistar, la posibilidad de ajustar tarifas está contemplada desde el contrato inicial. Lo mismo ocurre con Claro y ETB. Estas empresas están autorizadas a modificar sus precios, pero deben cumplir ciertos pasos para hacerlo de manera legal y transparente.
En Colombia, el ente que regula estos servicios es la Comisión de Regulación de Comunicaciones (CRC). La Resolución 5111 de 2017 permite a los operadores establecer libremente los precios de sus servicios, siempre que informen de forma clara al usuario cómo pueden cambiar esas tarifas. No están obligados a mantener un valor fijo, pero sí a actuar con claridad.
Uno de los puntos clave es que, desde el inicio, los contratos deben especificar si la tarifa puede cambiar, con qué frecuencia y cuál sería el límite máximo de aumento. Además, si el operador decide subir el precio, está obligado a avisarte al menos cinco días hábiles antes de que termine el ciclo de facturación en curso.
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La notificación debe llegarte por el mismo medio en que normalmente recibes tu factura: correo electrónico, mensaje de texto o cualquier otro canal aprobado. Así que, aunque el aumento parezca repentino, el operador tiene la obligación de informarte previamente.
Si no estás de acuerdo con el ajuste, lo primero es revisar el contrato o los términos del plan. Si notas que no te avisaron a tiempo o sientes que hubo una irregularidad, puedes presentar un reclamo directo al operador. Y si no obtienes respuesta o solución, puedes acudir a la Superintendencia de Industria y Comercio (SIC) o a la CRC para elevar tu caso.
Así pues, Movistar, Claro y ETB pueden ajustar sus tarifas, pero deben hacerlo de forma legal y con previa notificación. Como usuarios, es clave leer los términos del contrato, estar atentos a los avisos del operador y ejercer nuestros derechos si sentimos que no se está cumpliendo con lo pactado. La información clara y oportuna es la base de una relación justa entre cliente y proveedor.
Imagen: Generada con IA / ChatGPT
