Cuando pensamos en carros autónomos se nos viene a la cabeza compañías como Google o Tesla Motors. Estas compañías tienen en común que están establecidas en Silicon Valley y que no forman parte de la industria automotriz tradicional, con grandes exponentes provenientes de Detroit, Alemania o Japón. Sin embargo, de acuerdo con información de Reuters, las automotrices tradicionales tienen mayor número de patentes que las empresas de tecnología de Silicon Valley que trabajan en el tema.
El estudio de la división de propiedad intelectual y de ciencia de Thomson Reuters, del cual hace referencia el medio, se basó en el análisis del número de solicitudes de patentes hechas por los fabricantes de carros y las empresas de tecnología, con temas de tecnología para carros autónomos.
Los resultados del estudio muestran que la compañía japonesa Toyota Motor Corp es la líder en cuanto a patentes en este aspecto. De ahí, le siguen la alemana Robert Bosch GmbH, la japonesa Denso Corp, la coreana Hyundai Motor Co y la estadounidense General Motors Co. En cuanto a las empresas de tecnología, la que tiene más patentes es Alphabet Inc, dueña de Google, y se ubica en el puesto 26 de la lista.
Toyota cuenta con más de 1.400 patentes de equipos para carros autónomos, lo cual significa más del doble que las otras empresas. Por ejemplo, una de las patentes de la compañía japonesa tienen que ver con software que evita que se apague el sistema de conducción autónoma del carro, a menos que el conductor así lo quiera.
Tener muchas patentes no significa que se es líder
Como podrán imaginarse, esto no significa que estas compañías tendrán el liderazgo en el desarrollo de carros autónomos, pues de acuerdo con Tony Trippe, autor del estudio, las compañías de origen diferente a Estados Unidos suelen solicitar mayor número de patentes que las empresas de Estados Unidos. El número, además, no significa calidad y las patentes no son comparables, ya que unas pueden ser más complejas que otras.
Por otro lado, ya hemos comenzado a ver cómo las diferentes empresas fabricantes de carros se están aliando con empresas de tecnología para desarrollar sus carros autónomos. Recientemente vimos como GM se alió con Lyft, la competencia de Uber en Estados Unidos, para crear su propia red nacional de vehículos autónomos, así como los acuerdos entre Google y Ford.
Es muy probable que este tipo de alianzas se siga forzando, como en el caso del desarrollo de vehículos eléctricos –el gran fuerte de Tesla Motors–, con la alianza entre BMW y la compañía de Elon Musk.
El futuro podría ser, en parte, eléctrico, pero no sabemos si en el corto plazo veremos vehículos autónomos por ahí. Por el momento, compañías como BMW están empezando a mostrar sus conceptos de carros semiautónomos, y probablemente este será el primer paso de la industria.
Imagen: Toyota.
