Es más difícil negar el calentamiento global que demostrar que es una realidad. La Nasa declaró esta semana que el 2017 fue el segundo año más caliente desde finales del siglo XIX. Pero no conforme con el veredicto de la agencia espacial, la Administración Atmosférica de Estados Unidos (NOAA), clasificó el año pasado como el tercero más caliente de la historia, en sus registros. Con ese puesto de diferencia, ambos coinciden en que nuestro planeta ha enfrentado sus años más calientes a partir de 2010.
A pesar de que en 2017 vimos temperaturas más frías de lo normal en algunas partes del mundo; en el planeta, en general, seguimos viendo una tendencia al calentamiento, que ha venido subiendo en los últimos 40 años. Así lo afirmó el director del Instituto Goddard de Estudios Espaciales de la Nasa (GISS), Gavin Schmidt.
Como les contamos el año pasado, 2016 fue, y sigue siendo, el año más caliente de la historia. Pero ese año tuvo la particularidad de que durante el primer tercio del mismo experimentó un efecto de El Niño, que venía desde 2015. Este fenómeno alteró los patrones del clima, y causó que el promedio de las temperaturas globales se alterara.
Sin los efectos de estos fenómenos (La Niña también emergió a finales del año pasado), 2017 habría ocupado el año más caliente de la historia.
La temperatura promedio de la Tierra ha aumentado unos 0,9 grados centígrados en el último siglo, dijo la Nasa. Esto a pesar de que las dinámicas del clima se presentan de distintas formas dependiendo de la ubicación geográfica.
Así estamos viendo el calentamiento global
La cantidad de dióxido de carbono que emitimos las personas hacia la atmósfera es el principal motivo de este calentamiento, y los efectos han sido más que obvios (no para todos, lastimosamente). Las regiones Árticas han sido las más ‘golpeadas’, lo cual ha causado una gran pérdida de hielo. Y como obra de la ironía, la Antártida no pierde hielo, sino que se congela más. Aquí te contamos por qué esto es muy preocupante.
La Nasa actualizó su base de datos con todo lo del año pasado, y puedes consultarla aquí, si eres curioso. La agencia monitorea las temperaturas globales usando una red de 6.300 estaciones de clima, observaciones náuticas de varios buques, y mediciones provenientes de sus instalaciones de investigación en la Antártida. La institución compara las desviaciones actuales, a partir de una línea base de temperaturas registradas desde 1951 a 1980.
Mira aquí un video en el que se muestra este aumento en las temperaturas:
Imagen: Nasa.