Un reciente estudio liderado por investigadores del Laboratorio de Propulsión a Chorro (JPL) de la NASA advierte sobre un fenómeno que podría transformar el acceso al agua dulce en las próximas décadas. Para el año 2100, tres de cada cuatro acuíferos costeros en el mundo serán invadidos por agua salada, lo que pondrá en riesgo el suministro de agua potable y para riego en vastas regiones, además de generar impactos significativos en los ecosistemas y la infraestructura.
El fenómeno ocurre en zonas costeras donde el agua dulce subterránea y el agua salada del océano interactúan. Normalmente, estas masas de agua se mantienen en equilibrio: la presión del océano empuja el agua salada hacia la costa, mientras que el flujo de agua dulce subterránea hacia el océano contrarresta ese avance.
Sin embargo, dos factores asociados al cambio climático están alterando este equilibrio. Por un lado, el aumento del nivel del mar está intensificando la presión del agua salada, empujándola hacia el interior. Por otro, la disminución de la recarga de agua dulce subterránea, causada por patrones climáticos más cálidos y precipitaciones reducidas, está debilitando la capacidad de resistencia del agua dulce.
El agua salada que invade los acuíferos costeros los vuelve inutilizables tanto para consumo humano como para riego agrícola. Esto no solo agrava la crisis del agua potable, sino que también afecta la producción de alimentos, especialmente en regiones que dependen de estas fuentes subterráneas para la irrigación.
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La salinidad también tiene efectos corrosivos en la infraestructura. Tuberías, sistemas de distribución de agua y cimientos de edificios están en riesgo de sufrir daños acelerados, lo que representa costos económicos adicionales para las comunidades costeras.
El aumento de la salinidad en los acuíferos no solo impacta a los humanos. Los ecosistemas que dependen del agua dulce, como humedales y manglares, también se ven amenazados. Estos hábitats esenciales para la biodiversidad podrían transformarse drásticamente, afectando a especies que dependen de ellos.
Regiones más vulnerables
El estudio de la NASA, basado en datos de más de 60,000 cuencas hidrográficas costeras, identifica las áreas más vulnerables. Las costas bajas, como las del sudeste asiático, el Golfo de México y la costa este de Estados Unidos, son las más expuestas al impacto del aumento del nivel del mar.
Por otro lado, regiones áridas como la Península Arábiga, Australia Occidental y la península de Baja California en México enfrentan mayores problemas debido a la reducción de la recarga de agua subterránea.
Hacia finales de siglo, se estima que el 77% de las cuencas hidrográficas costeras en todo el mundo experimentará intrusión de agua salada. El alcance de este problema dependerá de dos factores clave:
Aumento del nivel del mar: Determinará la expansión global de la intrusión.
Tasa de recarga de agua subterránea: Definirá la profundidad de penetración de la salinidad en tierra firme.
Las soluciones varían según la causa predominante en cada región. En áreas donde la baja recarga de agua es el problema principal, la gestión de los recursos subterráneos será crucial. Por ejemplo, medidas como la protección de zonas de recarga o la reducción del uso de agua subterránea pueden ayudar a mitigar el problema.
Por otro lado, en regiones donde el aumento del nivel del mar es la mayor amenaza, las soluciones incluyen la construcción de barreras contra la intrusión de agua salada o la desviación del agua subterránea para proteger los acuíferos.
El panorama global: un desafío para todos
La investigación no solo resalta el impacto desigual del cambio climático, sino también la necesidad de cooperación internacional. Los países con menos recursos son los más afectados, pero también son los que enfrentan mayores dificultades para implementar soluciones.
“El cambio climático no respeta fronteras, y la intrusión de agua salada no es la excepción”, afirma Ben Hamlington, científico del clima del JPL y coautor del estudio. “Un marco globalmente consistente que capture los impactos locales es crucial para ayudar a quienes más lo necesitan”.
Imagen: Alexpunker