En redes sociales, a manera de broma, hablan de ‘Dragon Ball’ como una religión. Entre muchas otras cosas, argumentan que, como Jesús, Gokú se ha sacrificado para salvar a la humanidad, solo que a diferencia del nazareno, que solo lo hizo una vez, el sayayín lo ha hecho en varias ocasiones.
Pero, además, ‘Dragon Ball’ tiene un aspecto que es básico en todas las religiones (aunque en muchas de ellas son mal interpretados o se llevan a un extremo peligroso): promover valores para hacer de sus adeptos mejores personas para la sociedad. Eso es lo que señala un estudio que Vicente Ramírez Jurado presentó como tesis para su doctorado en Ciencias Sociales y Jurídicas de la Universidad de Cádiz.
Una Genkidama de valores
https://youtu.be/CbjYlkPFZWU
En principio, su tesis buscaba establecer si los mangas y el anime de ‘Dragon Ball’ funcionan como herramientas pedagógicas para promover valores. Para ello contó con la ayuda de 200 personas de la Universidad de Cádiz, de la Universidad de Colorado State y de la Universidad de Kuoto Seika, como explica Código Espaguetti.
Ese mismo medio entrevistó a Ramírez Jurado, autor de ‘La biblia de Dragon Ball’, uno de los textos más completos en español sobre el manga y anime creado por Akira Toriyama. Además, los resultados de su tesis fueron publicados por la editorial Océano en un libro titulado ‘Dragon Ball – Fenómeno Social’.
Ramírez Jurado ve en ‘Dragon Ball’ un fenómeno social, cuyo interés se ha mantenido hasta ahora y que conecta a cientos de personas en el mundo. Ese nivel de interés y de interacciones sociales son aspectos que el académico considera suficientes para creer que ‘Dragon Ball’ tiene crédito suficiente para ser una herramienta válida en las ciencias sociales y la educación, tal y como explica en su entrevista.
Pero no solo es eso. Para Ramírez Jurado, los valores positivos que se manifiestan en ‘Dragon Ball’ son “llamativamente superiores a los negativos”, afirma, en declaraciones recogidas por Código Espaguetti. Luego agrega: “Los tres valores universales más identitarios serían la amistad, el sentido del humor y la justicia. En el campo de los contravalores, los más identificados son la violencia y el machismo”.
Esto lleva a pensar que los fanáticos de Gokú y los Guerreros Z tienen círculos de amigos más fuertes y duraderos, son más sociales, optimistas, aprenden mucho más rápido, tienen mayor interés por realizar sus labores, no se rinden con facilidad e, incluso, leen más, según Fayer Wayer.
Pero no todo es color de rosa en ‘Dragon Ball’
Sin embargo, esto no quiere decir que todo lo que está en ‘Dragon Ball’ sea positivo. Ramírez Jurado está consciente de que Gokú no es perfecto. Por ejemplo, no es un padre modelo. “Es un auténtico amante de la naturaleza, la aventura y las artes marciales, y a veces antepone esas pasiones a otras responsabilidades más estereotipadas en la sociedad actual, y eso puede generar algunas criticas […] su comportamiento no deja lugar a dudas de su buen corazón, su honestidad, su bondad y el amor por su familia, sus amigos y el propio planeta”, afirma Ramírez Jurado en su entrevista para Código Espaguetti.
Además, Ramírez Jurado habla sobre el machismo que hay en ‘Dragon Ball’. Para él, este manga, como cualquier otro del género shonen, muestra a la mujer en un papel secundario y con estereotipos tradicionales. Sin embargo, también muestra valores femeninos adelantados a su época.
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En un momento en el que “Disney solo concebía a las mujeres reservadas, pudorosas y desvalidas, que 
bailaban y cantaban con animalitos a esperas del príncipe que las rescatara, los principales personajes femeninos en ‘Dragon Ball’ [Bulma, Milk o Andriode 18] se muestran mucho más inteligentes, atrevidas, desafiantes e inconformistas”, explica el académico.
Para quienes no están interesados en el estudio del libro ‘Dragon Ball – Fenómeno social’, pueden encontrar un material de colección. El texto contiene capítulos sobre partes de la historia del manga y el anime, una clasificación de personajes, varias infografías y una gran parte dedicada a Akira Toriyama, con un listado de sus otros mangas, una biografía y fotos inéditas o que no habían sido publicadas en buena calidad.
Así que, si alguien te pregunta si eres una buena persona, tú puedes contestarle: por supuesto, soy fan de ‘Dragon Ball’, creo en Son Gokú y sus enseñanzas recogidas en los evangelios según Krillin. Kamén.
