El neurocientífico David Eagleman presentó a la comunidad científica un chaleco que usa el sentido del tacto para ayudar a las personas sordas a escuchar de nuevo. Este invento revolucionario está basado en la neuroplasticidad, es decir, en la premisa de que el cerebro cambia constantemente a lo largo la vida de un individuo, permitiendo que este pueda conectar y volver a conectar sus neuronas con otras neuronas diferentes.
El chaleco fue desarrollado -junto a Scott Novich y el equipo de Rice University- utilizando la técnica de sustitución sensorial, que asume las funciones de un órgano sensorial dañado (en este caso el oído), al alimentar otro canal u órgano sensorial como el tacto. De la misma forma que algunas personas ciegas son capaces de usar la ecolocación para ver sus alrededores, este chaleco les permite a las personas sordas entender conversaciones mediante el tacto.
De acuerdo con el Foro Económico Mundial, el chaleco versátil extrasensorial (Vest por sus siglas en inglés) está equipado con una serie de motores que vibran cuando un micrófono capta el sonido de su entorno. El sonido captado por el micrófono es procesado por un microcontrolador que luego traduce los datos en vibraciones que una persona podría sentir. Con un poco de costumbre, una persona puede finalmente percibir el sonido a través de medios táctiles.
VEST se une a una creciente lista de dispositivos que permiten a la gente sentir su entorno de diferentes maneras, e incluso ayudar a algunos a recuperar sus sentidos. Tecnologías como el dedo biónico que le ayudan a las personas que han sufrido amputaciones a recuperar su sentido del tacto o la camisa que detecta la contaminación atmosférica, posibilitan que las personas puedan percibir un mundo hasta ese momento desconocido.
Eagleman comparte esta misma visión y afirma que el chaleco podría ser utilizado -incluso- para otros fines como transmitir los precios del mercado de valores con el fin de que las personas exploren la economía del mundo, o para que los pilotos puedan percibir la orientación de su avión de forma más intuitiva, permitiendo que un vuelo sea mucho más estable; o para que los astronautas puedan ‘sentir’ el estado de la Estación Espacial Internacional usando esta tecnología.
Seguramente todas estas innovaciones podrían transformar completamente la manera en que los humanos ven la realidad.
Imagen: Pexels.