Los informes que año a año presenta la Organización Meteorológica Mundial sobre el calentamiento global siguen sumando pruebas y ejemplos sobre el amplio impacto que tiene el fenómeno climático en el planeta. La declaración anual que la OMM presentó la semana pasada alerta sobre la relevancia que tienen las acciones humanas en el cambio climático, como señala El País.
El informe señala que 2013 es uno de los años más cálidos según los registros de la organización, un dato que se suma al grave señalamiento que durante el siglo XXI se han dado 13 de los años más cálidos que ha podido registrar la entidad. A estos récords se suma el hecho que 2013 fue el año más caliente en Australia y el segundo en Argentina. Esto quiere decir que, en cuanto a los registros de la OMM, el calentamiento global a largo plazo es una cruda realidad.
Según afirma una de las autoras del estudio, la científica Jessica Bluden, algunos cambios y fenómenos pueden atribuirse a cambios climáticos naturales como El Niño o La Niña. A pesar de esto no deja de señalar que “vemos muchos casos en los que los episodios extremos se producen tal y como los científicos habían proyectado en función del cambio climático”, recalcando que el Panel Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático aceptó en septiembre del año pasado que el calentamiento global tiene una clara influencia humana.
El informe registra que la temperatura promedio del planeta para 2013, contando la superficie de los océanos y en tierra, es de 14.5 grados centígrados, lo que quiere decir que en comparación a las décadas de los sesenta a los ochenta, el planeta ha aumentado su temperatura medio grado.
Michel Jarraud, secretario general de la OMM, señaló durante la presentación del informe que “muchos de los fenómenos meteorológicos extremos que se produjeron en 2013 corresponden a las consecuencias que se esperaban que tuviera el cambio climático provocado por la actividad humana”.
Imagen: AZRainman (Vía Flickr).