Si siempre te has preguntado por qué el tocino es tan mágico y delicioso, y por qué parece que cada vez que olemos un poco de su dulce, dulce fragancia parece que nos drogáramos como en ‘Requiem for a Dream’, la ciencia te da una respuesta. Aquí está la deliciosa explicación química de nuestro amor por este manjar.
Compound Interest explica que alrededor de 150 compuestos orgánicos volátiles se encuentran en el aroma del tocino calentado. Estos compuestos se forman cuando el calor hace que los aminoácidos del tocino reaccionen con los azúcares, lo que también se conoce como una reacción de Maillard. Esta reacción es lo que da el color (y sabor) característico a otros alimentos que se calientan, como el pan, un buen filete de carne, las papas a la francesa e incluso dulces como el caramelo y el chocolate. ¿Es coincidencia que todos los alimentos mencionado sepan tan bien? ¿O será todo un complot de los hombres lagartos por conquistarnos con la comida para controlar nuestros actos?
En todo caso, volvamos al tocino. Al reaccionar, emite partículas de hidrocarbonos, aldehídos, cetonas, alcoholes, compuestos con nitrógeno y furanos. Estos últimos dos grupos tienen los compuestos que dan el característico olor del tocino, y a su vez son compuestos que estimulan de manera efectiva el cerebro para que responda humedeciendo la boca e, intuitivamente, abriéndonos el apetito. No importa si eres vegano nivel 6 o si le ganas a Homero comiendo cualquier animal que haya pisado la tierra… con la química de estos compuestos, cualquier pagano que tenga sentido del olfato quedará tentado por ese delicioso manjar.
Como dato curioso, prepárense para el 30 de agosto, día internacional del tocino… Porque ese día nadie escapará de su sabrosura.
Imágenes: Didriks (via Flickr), GIF de Requiem for a Dream’ (via Learning to fly en Tumblr)
“No importa si eres vegano nivel 6” jajaja
“No importa si eres vegano nivel 6” jajaja