Muchas veces estás en una reunión y ‘sientes’ que alguien te está observando. Inmediatamente volteas y te das cuenta de que es verdad, otra persona te estaba mirando. ¿Te has preguntado cómo es posible que sepamos que nos están observando?
Popular Science nos brinda una explicación que nos dejará tranquilos. Todo se remonta a 1898, cuando un sicólogo de la Universidad de Cornell, Edward Tichener, usó varias pruebas en sus estudiantes para demostrar que ‘sentirse observado’ era causado por neurosis. En ese momento, esa era la teoría más aceptada. Pero hoy, ya sabemos que ese sentimiento no tiene mucho que ver con esa enfermedad mental.
La ligera ‘paranoia’ puede ser causada por varios factores. Uno de ellos es que las personas solemos recordar los momentos en los que volteamos y nos damos cuenta de que nos están mirando. Pero nunca recordamos las veces en las giramos y no nos están viendo. Entonces parece ser que es un juego de memoria lo que nos hace pensar que esta vez va a acabar igual: que nos estén observando. Pero cuando no sucede eso, lo olvidamos. También puede pasar que la persona a la que descubres mirándote tan sólo reaccionó a un movimiento que hiciste, o algo que dijiste y por eso se volteó hacia ti.
Otra de las posibles explicaciones es que esta sensación es producto de una imaginación hiperactiva. Según algunos estudios, esto puede pasar cuando escuchamos un sonido detrás nuestro que es muy ligero para que nuestra conciencia lo percibe lo suficientemente fuerte para que los circuitos de miedo en la amígdala se activen. Nos referimos a la amígdala como una parte del cerebro que es responsable de procesar la memoria, la toma de decisiones, y las reacciones emocionales. Entonces, cuando se activa el miedo, el cerebro empieza a construir una historia que pueda explicar el sonido.
Esta explicación puede sonar un poco a paranoia, pero según James Allan Cheybe, doctor de la Universidad de Waterloo, los comportamientos de las personas diagnosticadas con paranoia son exageraciones de reacciones que comúnmente tienen las personas ‘sanas’.
Imagen: Flood G. (vía Flickr).