El estado de Virginia en Estados Unidos es el primero en el país en aprobar una legislación que le permite a los robots de entregas operar en las vías peatonales del estado. La nueva ley entrará en vigencia el 1 de julio de este año y fue firmada hace una semana por el gobernador, informó Recode.
Los dos legisladores de Virginia que promovieron la ley, Ron Villanueva y Bill DeSteph, se aliaron Starship Technologies, una compañía de robótica para envíos establecida en Estonia, para construir esta nueva ley. Los representantes le contaron al medio que no se enfrentaron a negativas de parte de los demás legisladores, sino intriga y curiosidad sobre la tecnología, sus aplicaciones y cómo podría beneficiar a los ciudadanos.
Los robots que operen amparados bajo esta legislación no podrán exceder las 10 millas por hora (unos 16 kilómetros por hora) ni podrán pesar más de 50 libras (23 kilogramos), pero podrán moverse autónomamente. La ley no exige que los robots se mantengan a la vista de una persona que lo controle, pero se requiere que una persona monitoree a distancia el robot y pueda tomar control si algo sale mal. Además, los robots solo pueden transitar en los andenes.
Los gobiernos de cada ciudad del estado tienen el poder de regular la forma en que operarán los robots localmente. Por ejemplo, un alcalde podrá imponer un límite de velocidad más estricto o incluso prohibir el uso de los robots.
Aunque Starship Technologies fue la empresa que ayudó a que se aprobara la nueva ley, también se abre la posibilidad para que otras compañías de robots para envíos operen en Virginia. De hecho, los legisladores contaron que compañías como Amazon y Grubhub ya les enviaron cartas de apoyo respecto a la nueva ley de robots. Y han recibido interés de parte de Marble y Dispatch, que también están trabajando para llevar entregas autónomas a las calles de las ciudades en Estados Unidos.
Desde hace varios meses hemos recibido información sobre la cercana llegada de los drones para envíos, pero el proceso para los robots terrestres ha sido más sencilla y es la primera en tener éxito. Muchas compañías están detrás de la aprobación para los drones, pero ese método tiene muchos más impedimentos legales y regulatorios que el tránsito en tierra de robots autónomos, nos explica Ubergizmo. Ya podemos ver esto en la aprobación de servicios de transporte con carros autónomos, como es el proyecto de Uber.
Imagen: Starship Technologies.
