Presionar el obturador es fácil. Todos lo hacemos cuando iniciamos en la fotografía. Sin embargo, el verdadero valor de una fotografía es el mensaje que transmite por medio de la composición. Por eso es importante educar la mirada para aprender a tener la visión de un fotógrafo. Así las cosas, a continuación daré algunos consejos para que ejerciten su mirada y avancen en el mundo de la fotografía.
Tolerancia a la derrota del fotógrafo
Para poder ver como fotógrafo, se requiere de un proceso de aprendizaje extenso. Es similar al proceso de incrementar la masa muscular o adelgazar. Hay que cambiar algunos hábitos, ser paciente con los resultados y saber levantarse de la derrota. En muchas ocasiones las personas compran una cámara con la esperanza de aprender fotografía. En su primer intento, buscan lograr lo que les podría tardar un año o más. Entonces, al obtener resultados poco satisfactorios, tienen dos alternativas: continuar o desistir.
En la mayoría de las ocasiones, sucede el segundo, resultando la cámara envuelta en su empaque original. O en ocasiones, la cámara a la que se le invirtió una buena suma de dinero, termina siendo la de los paseos familiares o la de las fotografías frente al espejo. Pero en el primer caso, cuando el principiante prefiere continuar aprendiendo, la cámara se convierte en su herramienta de aprendizaje número uno.
Una vez el tiempo comienza a pasar, quien decidió continuar ya comprende la técnica y la puede aplicar en diferentes escenarios. Es decir, durante su proceso de enseñanza de la mirada, el fotógrafo amateur ya comienza a relacionar la técnica con las imágenes que ve. Cuando le llama la atención una imagen se pregunta qué velocidad, sensibilidad (ISO) y diafragma se usó en la fotografía.
Productos de terceros
Nada como ver películas clásicas y asistir a exposiciones para mejorar la mirada. Como el cine, que es ‘el primo’ de la fotografía, ya que ninguno puede existir por sí solo. Cada escena, por simple que sea, requiere de un encuadre y un correcto manejo de luces. El propósito del uso de estos tres elementos en transmitir un mensaje en cada fotograma de la escena.
En el caso de las exposiciones, vale la pena aclarar que Instagram, Flickr y Facebook no cuentan como galerías o museos. Es importante asistir a las exposiciones de fotógrafos que estén en nuestra ciudad. A diferencia de comentarios o ‘me gusta’, encontrarás que cada imagen contará con un recuadro que te servirá para entender la imagen. Analiza cada imagen, comparte tu opinión con alguien más y déjate guiar por los expertos.
Lee mucho
No solo para ser escritor se necesita leer. En el mundo de la fotografía es muy importante contar con bagaje literario. Regularmente, los libros de fotografía pueden contener muchísimas imágenes. Y cada una está acompañada de un contexto social, ya que con esta información podrás entender mucho mejor el mensaje que quiso transmitir su autor. Títulos como ‘Sobre la fotografía’ de Susan Sontag o ‘La cámara lúcida’ de Roland Barthes son algunos de mis recomendados. Es importante conocer cómo otras personas narran al mundo, para que construyas tu propio modelo de contar historias.
Conoce lo que tienes
La diferencia entre una cámara profesional y una semiprofesional son sus limitaciones técnicas. Como dicen por ahí “no es el indio sino la flecha”. Pero es importante que conozcas hasta dónde puedes llevar a tu cámara. De esta forma evitarás contratiempos porque tu equipo no responda bien en condiciones de poca luz y demás. Para saber hasta dónde puedes experimentar, investiga con el proveedor o en internet sobre las limitaciones de tu equipo.
En el caso de cámaras full frame, la calidad de la imagen será mayor que la de una réflex regular. Si es de lente intercambiable, tienes la posibilidad de llegar más lejos. Si no lo es, podrás desarrollar tus propias habilidades para lograr tus imágenes. Recuerda que todos comenzamos con cámaras sencillas y de baja gama. Nadie comienza en el mundo de la fotografía con una EOS 7D Mark III, así que no te apresures y aprende poco a poco.
Arma tus fotos con el ambiente
En el caso de la fotografía de moda y producto, hay todo un proceso de elaboración del entorno. Esto le permite al fotógrafo y al equipo de trabajo lograr la imagen lo más perfecta posible. Pero en otras ramas como macrofotografía, deporte, retrato y street photo, hay que aprender a usar lo que tenemos aquí y ahora. Ahí es cuando podemos usar a nuestro favor las líneas, sombras y figuras que puedan ayudar a construir la imagen.
Dependiendo del mensaje a transmitir podemos producir fuerza, agresividad, velocidad o tranquilidad. Las posibilidades son innumerables, y más si vives en una ciudad como Bogotá, donde en cada rincón hay una oportunidad diferente. Allí también puedes aplicar la escala de los objetos, la profundidad del espacio y la perspectiva.
Color y perspectiva
Un fotógrafo reconocido dijo en alguna ocasión “los pies son el mejor zoom”. No olvides que la composición de la imagen depende de la ubicación de la cámara. Te darás cuenta que, con dar unos simples pasos, la escena de la fotografía puede cambiar para bien o para mal. Según la perspectiva que uses, puedes crear seres gigantes o diminutos.
Y en cuanto al color, este elemento puede ser la única razón de una fotografía. Como lo expliqué en un artículo anterior, una imagen puede ser a blanco y negro o a color. Una vez más, todo dependerá de para qué quieres que el color perdure o desaparezca. Por ejemplo, en los grandes jardines, el color de las flores puede ser la justificación de la imagen. Otro de sus usos puede ser el minimalismo. Imagina una pared de color negro, por la cual pasa un perro de pelo blanco. Sin duda es una buena fotografía a color debido a su contraste.
Luz y contraste
Sin la luz la fotografía no existiría. Recordemos que, desde sus inicios, la luz fue la responsable de plasmar las imágenes en los daguerrotipos en cajas oscuras. Así como existe la luz, existe la sombra y esta cambia dependiendo la hora del día. Entre las 6:00 y las 9:00 de la mañana, te darás cuenta que algunos edificios tendrán la sombra apuntando hacia el occidente. Al medio día, ninguna edificación tiene sombra y entre las 3:00 y las 6:00 de la tarde la sombra apunta al oriente.
Puedes utilizar las diferentes horas para tomar tus fotografías. Pero te recomiendo que no tomes fotos a las 12:00 del mediodía, ya que los objetos de la imagen perderán profundidad y textura. Lo importante de una imagen siempre será la unión entre la luz y la sombra. Por eso es mejor a que esperes las primeras horas de la mañana o las últimas del día.
Armonía
Finalmente está la armonía. Esta se logra cuando los objetos principales de la imagen logran el equilibrio de la imagen. Por ningún motivo debes permitir que el objeto de interés quede en la mitad de la imagen. Para ello usa los puntos de interés que se aplican en la ley de tercios. Con estos obtendrás cuatro puntos para que ubiques aquello que quieres que se vea. De esta forma guiarás de forma correcta la vista de los espectadores. Ah y recuerda que debes practicar mucho. Practica tanto que la batería de tu cámara se agote.
Imágenes: ENTER.CO