Después de ‘Spider-Man: No Way Home’ había algo de esperanza en que Morbius fuera buena. Después de todo su historia es la de una serie de aplazamientos que, esperábamos, tuvieran que ver Sony buscando mejorar la calidad de su historia o aprendiendo de las lecciones de otras películas. También han escuchado que Morbius es la peor película de Marvel, pero esto es mentira.
Es la peor película de súper héroes en la última década.
Morbius intenta (y quiero hacer énfasis en ‘intentar’) contar la historia de Michael Morbius (Jared Leto), un genio con una enfermedad rara de la sangre. Morbius, como haría todo buen científico extravagante, rechaza un premio nobel y decide que lo mejor es continuar con sus experimentos ilegales con murciélagos… con la consecuencia insospechada de terminar él convirtiéndose en un vampiro. Después de un frenesí en el que mata a la tripulación que lo escoltaba de regreso a casa, Morbius decide que lo mejor es guardar el secreto de su vampirismo, aunque su hermano adoptado Milo (Matt Smith) tiene otros planes.
Si la trama en texto no tiene mucha gracia, en la pantalla grande no funciona mejor. Morbius tiene una historia que no tiene sentido la mayoría de las veces, combinado con un elenco de personajes que a duras penas pasa la barra de lo poco memorable. Su oscuridad no tiene el sentido artístico de ‘The Batman’, su humor negro no está ni cerca del de ‘Venom’ y sus escenas de acción son de las peores que puede tener un filme de acción.
Pedimos al MCU que ponga seguro a las puertas del multiverso, o al menos de la dimensión de Morbius.
Un vampiro sin colmillos
Seguir la historia de Morbius es una pesadilla. Desde la escena inicial que nos presenta al niño genio, hasta el clímax insoportable de lugares comunes mal ejecutados. Morbius intenta ser una historia de antihéroes, presentando al Dr. Morbius como este científico brillante, pero con un código moral bastante gris. El problema está en que estos momentos en los que la cinta intenta presentar el egoísmo de Morbius están combinados con escenas extrañas, como su obsesión por regalar animales de papel a las personas que aprecia. La cosa es que con Venom esta dualidad del personaje se sentía como una cualidad, como algo orgánico…
Es extraño que el mismo Sony que nos entregó la película de Spider-Man: Into the Spiderverse y otras maravillas animadas… que siga atrapado en la misma fórmula de películas de anti héroes. Morbius no solo es predecible de las peores maneras (es decir… desde la primera escena sabes bien cuál será el villano), sino que sus actos a menudo se sienten como la extensión de una historia que pudo durar una hora menos (lo que quizás habría hecho más fácil soportarla).
No hay colmillos en este vampiro. No hay un momento en el que te sientas remotamente interesado en su historia o que quieras saber cómo continúa. Por el amor de Dios: claven una estaca a este vampiro.
Esperen… ¿estaban peleando?
Morbius ni siquiera cumple el requisito mínimo de ser un filme de acción.
Sabemos que hay películas en las que la elección de no mostrar todo lo que está ocurriendo puede crear tensión y que un filme de vampiros la idea de la ‘oscuridad’ tiene sentido… pero hay una distancia entre esto y crear de escenas que simplemente no se entienden.
Es difícil describir las escenas de acción de Morbius… porque al día de hoy sigo sin entender bien qué fue lo que terminé viendo. Alguien en el equipo de efectos visuales estaba realmente enamorado de lo que llamaré ‘escarcha de vampiro’, porque a menudo se siente que no estamos viendo peleas sino una celebración después del partido de Santa Fe. Es esto o borrones de lo que asumimos es un vampiro, peleando con otro vampiro… mientras nos preguntamos si estamos frente al ‘Traje del emperador’ y simplemente se les olvidó grabar las peleas.
CG terrible con actores terribles
Leto parece estar en esta campaña de que intentemos olvidar su peor actuación… entregando una todavía peor. Ya habíamos logrado superar el trauma de su Joker, que… por alguna razón Snyder nos recordó… y luego nos trae a Morbius. Y uno supondría que el rol de un excéntrico médico/científico le quedaría bien… pero la verdad es que nuevamente nos demuestra que la única cualidad que tiene es la de hacer que cualquier villano o héroe nos parezca insoportable, al punto que le hagamos barra.
El CG de vampiros demuestra quizás el poco compromiso final que tenía Sony con esta película. Ni siquiera es malo… es poco atractivo e innecesario. Es quizás un reflejo del destino final de esta película en el panorama actual de súper héroes. Sony sigue intentando hacer películas para aprovechar los derechos de sus héroes, sin entender qué quizás primero debería apostar por al menos hacer una propuesta creativa. Lo ‘edgy’ de Morbius no es nuevo, no es atractivo y principalmente no es entretenido.
Conclusión: 2/10, que Morbius se quede en su ataúd
Con algo de optimismo Morbius se prepara para una segunda parte. No sé a qué cazador se deba llamar en esta ocasión, pero espero que este vampiro no se levante nunca más de la tumba. A estas alturas ni siquiera creo que es necesario pedir a Sony que suelte sus licencias a algún estudio que las use para algo más que mendigar taquilla… solo espero que esta sea otra de las secuelas que Leto jamás llegará hacer (que ahora que lo pienso, parece ser la única consistencia que el actor trae a su filme más reciente).
Imágenes: Sony Pictures