Hulk no iba a ser verde, pero… esta es la historia de lo que pasó

Desde que soy niño, cada vez que me hablan de Hulk me imagino a un sujeto musculoso muy iracundo y verde. Aunque en mi cabeza tengo recuerdos de mejores versiones que otras, siempre fue verde. El de Lou Ferrigno, de la serie live action que se transmitió entre los 70 y los 80, no es precisamente una de las mejores versiones que recuerdo, pero era verde. Siempre verde.

Pensar a Hulk con otro color es imposible, de hecho. De otra forma dejaría de ser el monstruo verde ¿no? Pero sus poderes, su fuerza y resistencia sobre humanas, no vienen de su color y es posible que en otro tono hubiera sido más imponente. ¿Se lo imaginan rojo, por ejemplo? ¿O qué tal amarillo? No, mala idea, parecería un banano con músculos o un minion con exceso de esteroides.

¿Gris? ¿Qué tal gris? Parecería de metal o de roca, eso lo haría más imponente. ¿Por qué no fue gris? Bueno, les tengo una noticia: ese iba a ser su color, gris, pero en la imprenta donde mandaron poner en papel el cómic que le dio vida al monstruo iracundo tuvieron problemas con el gris, como explica Stan Lee en una entrevista, que se puede ver en el canal de YouTube de ERstat77.

Stan, the man, cuenta el origen de Hulk, que creó junto con Jack Kirby en 1962. Lee explica que se inspiraron en las historias de ‘Frankestein’ y de ‘El extraño caso de Doctor Jekyll y Mr. Hyde’ para crear al Hombre Increíble. Sin embargo, el popular escritor de cómics, que falleció en noviembre de 2018, quería que el monstruo también fuera adorable, que la gente lo apreciara y quisiera protegerlo (tal y como pasa con el tierno Hulk de Ruffalo), porque cuando él era niño adoraba a Frankestein.

Para hacer creíble que una persona se convierta en un monstruo, porque para Stan Lee un héroe ideal es alguien que podría existir en la vida real, inventó la historia de los Rayos Gamma, sin tener idea de qué eran esos rayos y solo porque le sonaba muy científico. Así creó al héroe. Sin embargo, para que Bruce Banner, o su alterego, fuera un héroe, debía tener algunas cosas heroicas, como un traje.

¿No lo tienen en gris? ¿Qué tal… hmmm, verde?

Pero ¿cómo hacer creíble que un monstruo gigante y un poco descontrolado se ponga un traje? Fácil: dándole un color de piel distinto que funcione como una suerte de traje. Entonces, Stan Lee debía pensar en un color para la piel del monstruo y el primero que llegó a su cabeza fue el gris porque le parecía “un poco escalofriante, depresivo y misterioso”.

Así que Hulk iba a ser gris en el primer número de sus cómics, pero “por alguna razón la imprenta tenía problemas con ese color gris y en algunas páginas él [Hulk] era gris claro, en otras era gris oscuro y en otras lucía casi negro”. Entonces, Stan Lee pensó que no podían tener un héroe que estuviera cambiando de color de piel todo el tiempo y llamó a la imprenta para preguntar qué color podían imprimir sin problemas y le dijeron que cualquiera, que solo el gris estaba dando problemas.

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Entonces, Stan, The Man, se puso a pensar qué color no estaba usando otro superhéroe y se dio cuenta de que no tenía muchos personajes verdes y decidieron hacer a Hulk verde. “Quiero decir, fue solo casualidad y resultó ser una gran elección […] estoy muy feliz de haberlo hecho verde”, concluyó Stan Lee.

Sin embargo, el Hulk gris no se descartó del todo. De hecho, en la página de Marvel en la portada del primer número de los cómics de ‘The Incredible Hulk’, el monstruo luce gris. Para explicarlo, lo convirtieron en una versión que mostraba la personalidad infantil, egoísta y agresiva que Banner se dedicó a reprimir. Entre los 80 y 90, cuando Peter David escribió los cómics de Hulk, le dio al Hulk Gris, conocido como Grey Hulk, una personalidad renovada y un alias, Joe Fixit.

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De hecho, sí hay versiones de Hulk en diferentes colores, como rojo y azul. También hay versiones zombie, demoniacas, solitarias y hasta ancianas. Sin embargo, todos adoramos a nuestro viejo y conocido Hulkcito verde que aplasta todo y que nació de un error de imprenta. ¡Gracias, error de imprenta! ¿O tú lo preferirías en gris?

Imágenes: Marvel.

Fernando Mejía

Fernando Mejía

Quise ser músico, cineasta, astronauta, científico y poeta, cuando supe que solo me alcanzaba para la última, me hice periodista en el Externado para al menos escribir de todo eso y no defraudar al niño que fui.

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