A diferencia de lo que ciertos titulares alarmistas han dicho, con sus ‘última hora’ reportando nuevos casos en países diferentes, el principal afectado de la crisis actual han sido los eventos a gran escala. Dadas las medidas de salud que se han tomado, muchas ferias, conferencias y convenciones han decidido cancelar y evitar ser el foco de posibles contagios. Pero también porque estas mismas medidas han afectado las estrategias de publicidad de películas, juegos y equipos de tecnología.
La victima más reciente es la próxima película de James Bond, ‘No Time to Die’, que ha sido aplazada hasta noviembre de este año. Se trata de un cambio en el calendario importante, considerando que la película cambia por siete meses su fecha de estreno. Es además importante, pues es la primera cinta que se ve obligada a modificar su salida debido a la crisis de salud.
MGM, Universal and Bond producers, Michael G. Wilson and Barbara Broccoli, announced today that after careful consideration and thorough evaluation of the global theatrical marketplace, the release of NO TIME TO DIE will be postponed until November 2020. pic.twitter.com/a9h1RP5OKd
— James Bond (@007) March 4, 2020
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Es un efecto domino que no tiene tanta relación con la existencia de casos, más con las medidas de prevención a medida que casos aparecen en otras partes del mundo. DC, por ejemplo, tuvo que cancelar estrenos de sus cintas animadas, así como conferencias, la próxima cinta de ‘Misión Imposible’ detuvo su rodaje y diversos estudios han tenido que tomar medidas para modificar sus calendarios de giras y rodaje.
Pero la otra razón por la que la crisis representa desafíos para medios como el cine está en el mercado que ofrece China. Siendo uno de los consumidores más importantes, la situación actual no solo impide que se publiciten estas películas que se van a estrenar, sino que no garantizan una buena venta de tiquetes en las salas de este país, al menos mientras que haya una sugerencia de evitar agrupaciones públicas.
Pero en el caso de la cinta de Bond, también está el adicional de que su estudio no quiere que la situación actual desmerite los esfuerzos realizados. Se trata de la última cinta con Daniel Craig ocupando el nombre del espía, además del filme con mayor presupuesto de producción en la historia de la franquicia. La situación actual debe preocupar al estudio, considerando todos los factores. Un movimiento que no debería sorprendernos verse repetir, al menos hasta que la alerta por el Coronavirus baje.
Imágenes: Universal Pictures.