La franquicia de ‘Rápidos y furiosos’ es 100% testosterona. Las persecuciones en carros de lujo, las mujeres hermosas que asumen el rol necesario en cada película, las explosiones que persiguen cada escape de los protagonistas y, por supuesto, las peleas entre sus estrellas.
Por eso resulta extraño que una serie que se destaca tanto por ese sentimiento de ser ‘macho’, sea tan cuidadosa de proteger la imagen de sus protagonistas como ‘invencibles’. Una artículo para el portal Wall Street reveló que Dwayne Johnson, Jason Statham y Vin Diesel (que no aparece en ‘Hobbs & Shaw’, pero será protagonista en ‘Rápidos y furiosos 9’) tienen acuerdos con las productoras sobre sus peleas.
El centro de estos tratos está en que ninguno de los tres protagonistas quiere quedar como un ‘derrotado’ o ‘débil’ en los enfrentamientos. Esto quiere decir que los hombres de ‘Rápidos y furiosos’ no deben perder peleas y, cuando el enfrentamiento es entre ellos, usualmente la conclusión tiene que ser un empate.
Sí, no es que Hobbs sea más débil que Toretto, sino que no le gana en vencidas al ego del actor.
¿Cuántos puntos vale un cabezazo en ‘Rápidos y furiosos’?
Al parecer, los extremos para asegurar que cada pelea en ‘Rápidos y furiosos’ no deje a ninguno de sus protagonistas como un debilucho llegaron a un punto en el que Diesel, en algún momento, propuso un sistema en el que cada golpe tendría un puntaje, de manera que cada uno de los involucrados en una pelea a lo largo del filme sería apaleado de la misma manera.
“El plan de puntos de Diesel fue finalmente abandonado una vez que todos decidieron que era demasiado complicado, según una persona presente que trabajó con la estrella, pero fue un ejemplo del delicado equilibrio que se debe alcanzar en cada set en el que están los hombres”, afirma el artículo en The Wall Street.
Te puede interesar: Evaluación ‘Rápidos y Furiosos: Hobbs & Shaw’
Pero, aunque esta propuesta no fuera aplicada, hay ciertos acuerdos que siguen determinando qué tantos golpes reciben las estrellas de la franquicia. Stataham, que interpreta al espía Deckard Shaw, tiene un acuerdo con Universal Studios en el que pone un límite a qué tanto puede ser golpeado. Diesel, por otro lado, negocia el número de puños en cada película.
Los actores, al parecer, también son muy selectivos con la manera en la que el proceso de edición muestra sus peleas. Al parecer Stataham es bastante celoso con esto y, de acuerdo con una fuente, busca tomas que favorezcan y reafirmen su imagen de hombre invencible.
Imágenes: Universal Pictures