Disney+, Netflix, Amazon Prime, HBO Max, Star+, Paramount+, Crunchyroll, Claro Video, Apple Video… y con esto solo nos limitamos a las plataformas más conocidas. Hoy simplemente hay demasiadas alternativas para ver TV por streaming. Y, de acuerdo con un estudio realizado por Nielsen, la firma de análisis de datos, las personas hoy se sienten abrumadas por la cantidad.
La encuesta asegura que hoy un 46% de los consumidores sienten que hoy hay demasiadas plataformas para ver contenido, así como demasiadas series y películas disponibles. ¿Cuál es el problema? Hoy las personas sienten que es muy difícil encontrar un contenido específico en su aplicación favorita. Es decir, que hoy contamos con un mayor número de series y un mayor número de servicios, pero las personas sienten que la ‘opción de ver lo que quieren’ es menor.
No solo esto, sino que además el número de contenido por stream ha incrementado en el último año de manera exponencial. De acuerdo con Nielsen hoy hay más de 817.000 contenidos disponibles únicos (es decir, que están disponibles solo a través de streaming), en comparación con los 171.000 contenidos del año pasado.
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¿Significa que el aumento de contenidos y de plataformas que las personas se están cansando del streaming? Para nada. De acuerdo con la encuesta de Nielsen un 93 por ciento de los encuestados afirmaron que no solo planean mantener los servicios que tienen hoy, sino que incluso planean incrementar el número el próximo año. Otro dato interesante que deja el estudio es que el porcentaje de personajes que hoy cuentan con más de cuatro servicios de streaming se ha doblado (pasando del 7 al 18 por ciento) en los últimos tres años.
¿Cuál es la lección que deben tomar los servicios de streaming? La primera es que el panorama ha cambiado de manera importante en los últimos años. La primera es que los servicios de streaming son el factor dominante en el consumo y, más importante, que las personas se han acostumbrado a tener más de un solo servicio. Este punto puede parecer extraño, pero aquellos con mejor memoria recordarán aquellos días en los que tener dos suscripciones a streaming parecía exagerado.
La mentalidad antes era que Netflix resultaba más económico que tener cable. Hoy, por otro lado, parece que estamos bien con pagar más que con un plan de TV, pero elegir qué queremos ver (y más importante, cuándo lo queremos ver).
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