El apagón de la televisión analógica en Colombia marca un antes y un después en la historia tecnológica del país. A partir del 30 de marzo de 2025, comenzará la transición definitiva hacia la Televisión Digital Terrestre (TDT), una tecnología que promete revolucionar la forma en que los colombianos acceden al contenido audiovisual.
¿Qué es la televisión analógica y cómo se diferencia de la TDT?
La televisión analógica, presente en Colombia desde 1954, transmite audio y video mediante ondas continuas que pueden ser susceptibles a interferencias, lo que afecta la calidad de imagen y sonido. En contraste, la TDT utiliza un sistema digital que codifica la señal, permitiendo una transmisión más eficiente y robusta. Esto se traduce en imágenes más nítidas, sonido de alta calidad y la posibilidad de incorporar funciones interactivas, como guías de programación y acceso a contenido adicional.
Además, la TDT no requiere suscripciones ni pagos mensuales, lo que la convierte en una alternativa accesible y económica para todos los colombianos. Para disfrutar de esta tecnología, los usuarios necesitan un televisor compatible o, en su defecto, un decodificador y una antena UHF.
¿Cómo se implementará?
El Ministerio TIC, liderado por Mauricio Lizcano, ha trabajado activamente en el Plan General de Cese de Emisiones Analógicas (PGCEA), una estrategia que busca minimizar el impacto de la transición. En 2024, más de 56.400 hogares vulnerables recibieron equipos como antenas UHF y decodificadores, además de capacitaciones personalizadas sobre el uso de la nueva tecnología.
El proceso de selección de beneficiarios priorizó a familias de municipios PDET y aquellas con necesidades básicas insatisfechas, según el Sisben. Esta iniciativa no solo garantiza que estas comunidades no pierdan acceso a la televisión, sino que también fomenta la inclusión social y la reducción de la brecha digital en el país.
¿Cómo me impacta?
Para los usuarios, la transición a la TDT representa un salto significativo en la calidad de la experiencia televisiva. Con esta tecnología, los televidentes podrán disfrutar de imágenes en alta definición, sonido claro y la eliminación de interferencias que eran comunes en la señal analógica. Además, la TDT ofrece una mayor diversidad de canales, incluyendo opciones públicas y privadas, y nuevas funcionalidades como la guía de programación y el acceso a contenido interactivo.
Otro beneficio importante es el costo. A diferencia de otras plataformas digitales o servicios de televisión por suscripción, la TDT es completamente gratuita. Los hogares solo necesitan contar con un televisor compatible o, en caso de tener un modelo más antiguo, adquirir un decodificador y una antena UHF, lo que asegura que incluso las familias con recursos limitados puedan acceder a esta tecnología.
Por otro lado, la transición implica ciertos ajustes por parte de los usuarios, especialmente aquellos con televisores más antiguos. Para facilitar este proceso, el gobierno distribuirá inicialmente 44.000 dispositivos adaptadores a hogares vulnerables, asegurando que nadie quede rezagado en este cambio tecnológico.
Aquellos que aún no estén familiarizados con la TDT pueden acceder a la plataforma PACO y a los centros de atención especializados del Ministerio TIC para resolver dudas y recibir orientación. Además, se han implementado campañas informativas a través de redes sociales y sitios web para garantizar que todos los colombianos estén preparados para el apagón analógico.
Además el TDT no solo moderniza el sistema de televisión en Colombia, sino que también contribuye a la sostenibilidad. Al ser una tecnología más eficiente, reduce el consumo energético y optimiza el uso del espectro radioeléctrico. Esto abre la puerta a nuevas oportunidades en telecomunicaciones y garantiza que el país esté alineado con los estándares tecnológicos internacionales.
Imagen: makamuki0
