Ahora que Netflix tiene más competencia que nunca, la pregunta de muchos es cuál será la estrategia de la compañía. Una mayor oferta de este tipo de servicios significa dos cosas: menos licencias para alimentar su catálogo y usuarios que tienen más opciones para comparar costos y beneficios. Una de las opciones que a menudo se menciona es la posibilidad de que en algún futuro la plataforma opte por incluir anuncios, para de esa manera sostenerse económicamente. Rumores alimentados, además, por una presión de los inversionistas de la compañía.
Pero Reed Hastings, presidente de Netflix, volvió a afirmar que la plataforma no quiere incluir anuncios en su modelo. La afirmación la realizó durante su presentación de ganancias del último trimestre de 2019, en la que él explicó que la razón está en que, contrario a lo que se cree, “no hay dinero fácil en los anuncios en línea”.
El principal argumento de Hastings está en la manera en la que hoy está dividido el terreno de esta estrategia. “Google, Facebook y Amazon son tremendamente poderosos en la publicidad en línea porque están integrando tantos datos de muchas fuentes. Eso tiene un costo comercial, pero eso hace que la publicidad sea más específica y efectiva. Así que creo que esos tres van a obtener la mayor parte del negocio de publicidad en línea”, afirmó. Así, una razón convincente está en que el poder competir con estos gigantes requiere de una inversión, además del reto de quitar una porción de este negocio a las compañías antes mencionadas, por lo que no se trata de una solución fácil.
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La otra razón que presidente empleó está en que Netflix no quiere ingresar en este negocio por las polémicas más recientes que ha despertado. Las compañías antes mencionadas han entrado en el ojo del huracán gracias a la manera en la que recolectan información de los usuarios y la administran. Así, Netflix tendría que comenzar a obtener mayor información de sus usuarios, con el objetivo de dirigir los anuncios a los públicos más objetivos.
Aunque Hastings afirmó que en Netflix “No recogemos nada. Estamos realmente enfocados en hacer felices a nuestros miembros”, lo cierto es que la plataforma si recopila datos de sus usuarios. De hecho, muchos de los productos de la plataforma (como ‘House of Cards’) han sido creados utilizando los resultados de géneros, temas, duración y otra información de visualizaciones que la compañía obtiene. Así, lo más seguro es que la visión de la compañía es que entrar en este negocio los obligaría a ser mucho más transparentes con el uso de esta información. Una idea que parece comprobada por una afirmación de Hastings, que también dijo que “creemos con nuestro modelo que realmente obtendremos mayores ingresos, mayores ganancias, mayor capitalización de mercado porque no tenemos la exposición a algo en lo que estamos estratégicamente desfavorecidos, que es la publicidad en línea contra esos tres grandes”.
Por último está la experiencia del usuario. Frente a la cantidad de servicios en el mercado, una de las peores opciones que podría tomar Netflix es la de agregar una opción tan poco popular como es la adición de anuncios dentro del servicio. “Tenemos un modelo de negocio mucho más simple, que se centra únicamente en la transmisión y el placer del cliente”, afirmó el presidente de Netflix.
Imágenes: Netflix
