Digg fue una de las primeras redes sociales de noticias en Internet, una innovación que muchos pensaron le aseguraría un futuro brillante y, sobre todo, lucrativo. La idea detrás del proyecto es que los miembros de Digg puedan sugerir, por medio de votos, cuáles son las noticias o los artículos más interesantes de la Red. Su éxito inicial fue enorme, pero en los últimos años las cosas han empeorado hasta el punto en que Kevin Rose, uno de los fundadores de la empresa, confesó estar cansado de los líos de Digg.
Durante el evento Disrupt (inglés), organizado por TechCrunch, Rose reveló su fatiga (inglés) corporativa. Según sus declaraciones, el emprendedor se siente “desgastado” por los recientes reveses que ha tenido la compañía, la cual ha sufrido una caída pronunciada (inglés) en tráfico desde que fue remodelado el sitio con la versión 4 de Digg. Su descontento es de tal magnitud que podría abandonar la compañía que fundó al final de este año, aunque en el evento Rose no confirmó que la decisión estuviera tomada, tan solo que lo está pensando.
Además de sus problemas por tráfico, una decisión corporativa tiene desilusionado a Rose. En 2008, cuando Digg estaba pasando por su mejor momento, todo parecía indicar (inglés) que alguien iba a adquirir la red social de noticias. El negocio nunca se concretó, pues aunque Rose quería aceptar los 80 millones de dólares ofrecidos para adquirir a Digg (nunca se confirmó si la empresa interesada era Google, pero todos los rumores apuntaban a que ese era el caso), la junta directiva decidió rechazarlos.
A pesar de sus reveses, Digg continúa siendo una parte importante de Internet. La mayoría de los sitios web más populares aún tienen los botones para ‘digg’ sus artículos y según el ranking de Alexa.com, Digg es el sitio número 113 en cuanto a tráfico total en la Web. Con esas ventajas, quizás todavía hay esperanzas para la empresa, pero si se va Rose la motivación de quienes trabajan por el éxito de Digg podría desaparecer del todo.
¿Quién quiere luchar por una empresa en la que no cree ni siquiera su fundador?
Pues hombre, que mal rollito esa situación. El tipo pinta aunque tiene caspa jaja.