El fundador de la red social más grande del mundo, Mark Zuckerberg, insiste en dar la batalla por defender la propiedad de la misma y hacer frente a la demanda instaurada por Paul Ceglia, quien desde hace varios meses llevó a los estrados su reclamo por el 50% de la popular red social.
Esta vez, el polémico Zuckerberg –quien en días pasados participó activamente en el e-G8– dio a conocer públicamente las pruebas con las cuales niega la autenticidad de los argumentos presentados por Ceglia. Según el líder de Facebook, los correos y el supuesto contrato presentados para sustentar la acusación son falsos y, por el contrario, el demandante está relacionado con fraudes de terrenos en un sector de la Florida (Estados Unidos).
A la defensa del fundador de la red social se suma la declaración de un investigador privado que asegura que Ceglia tiene que ver con varias estafas a un buen número de residentes en esa ciudad estadounidense por ventas de propiedades en eBay. Según él, quien demanda a Zuckerberg convenció a varios compradores, con planos falsos, de que los terrenos eran edificables. Afirmación que legalmente carece de certeza.
Por su parte, el actual presidente de Facebook enfatizó en rechazar la acusación de supuestos acuerdos relacionados con la propiedad de la red social, que ya está alrededor de los 700 millones de usuarios en el mundo. “No sostuve ningún acuerdo, escrito o de otro tipo, con StreetFax, Ceglia, ni nadie asociado con Ceglia que tenga que ver con Facebook o cualquier sitio de redes sociales relacionado”, dijo Zuckerberg, y según Wired agregó bajo juramento, que no escribió ni recibió “ninguno de los supuestos correos electrónicos citados en la demanda ampliada”.
Hasta el momento, los documentos están siendo supervisados por la Corte Federal de Nueva York, pero se han detectado indicios de falsificación en algunas partes del contrato mencionado por Ceglia, al igual que legitimidad en los correos expuestos por el demandante.
Con este nuevo contragolpe de Zuckerberg se calienta la pelea por la propiedad de Facebook, que cada vez parece estar más hacia el lado de su fundador.