Una startup nacida en Boston, llamada Spoiler Alert, logró recaudar 2,5 millones de dólares en un año, con un negocio que ayuda a disminuir el desperdicio de alimentos y combate el hambre. Spoiler Alert (‘spoil’ en inglés singnifica echar a perder) ofrece un software administrativo que le ayuda a industrias y granjas a hacer buen uso de su inventario de comidas, en lugar de botarla, según reportó TechCrunch.
Desde 2015, la startup ha estado trabajando con grandes productoras de comida y granjas, entre las que está Sysco Corporation, una gran compañía que le vende comida y bebidas a restaurantes , cafeterías y hoteles.
El CEO de Spoiler Alert, Ricky Ashenfelter, le explicó al medio que su startup no está haciendo nada que sea revolucionario a nivel tecnológico o científico por sí mismo. Usan un software en la nube para conectar organizaciones que antes no podían coordinarse correctamente, como productores de comida, compañías de logística, bancos de comida y dispensarios.
La plataforma de Spoiler Alert le ayuda a los productores de comida a monitorear lo que están ‘desechando’, lo que les permite recibir créditos de impuestos por donar comida, en lugar de botar los alimentos a rellenos sanitarios.
Pero la compañía no solo busca que los productores donen la comida que ya no van a vender, sino que le ayuda a otras compañías a vender verduras, frutas, carnes y otros alimentos a otros precios con descuento.
Por ejemplo, productos agrícolas como zanahorias ‘feas’, manzanas con golpes, a pesar de que se pueden comer, no se venden en los supermercados. Así que un productor de verduras puede usar Spoiler Alert para vender sus manzanas con golpes a un establecimiento que venda jugos, o sus zanahorias feas a un restaurante que las use para hacer sopas.
La plataforma de Spoiler Alerta básicamente se convierte en un mercado secundario para alimentos, entre los que están frutas y verduras ‘feas’ y productos cerca de su vencimiento.
El dilema de los supermercados
El problema de los alimentos ‘feos’ o a punto de vencerse sucede en todo el mundo. Las peticiones para reducir el desperdicio de comida y el incremento de donaciones para combatir el hambre son cada vez más, y así mismo las decisiones políticas se han movido un poco a favor de la donación de comida a los Bancos de Alimentos. Pero la diferencia entre lo que en cada país se hace respecto a la disposición de alimentos está en lo que los gobiernos dicten. Por ejemplo, en Estados Unidos se obliga a los establecimientos disponer de una forma sostenible los alimentos que no se venden, de lo contrario está prohibido regalarlos. Muchas veces las obligaciones que imponen los gobiernos son complicadas y le piden acciones extra a las compañías, lo que causa que se prefiera botar los alimentos. Sin embargo, todo radica en la voluntad de los países. El año pasado Francia dictó que los supermercados de más de 400 metros cuadrados no pueden tirar a la basura productos perecederos. Por obligación, los establecimientos deberán donar esa comida para alimentar animales o para hacer abono.¿Qué pasa en Colombia con el desecho de alimentos que no se venden? En 2011, en Colombia se llevó a cabo la Primera Conferencia Latinoamericana de Bancos de Alimentos, en la que se concluyó que el actual modelo tributario del país no estimula la donación de alimentos. Aunque existe un incentivo para los donantes que se descuenta del impuesto a la renta de las compañías, el ‘premio’ no supera lo que se paga en IVA por esos alimentos. El desperdicio de comida en Colombia deja toneladas de frutas, verduras y alimentos perecederos en los rellenos sanitarios, mientras que cientos de personas sufren de hambre. Es por eso que han surgido programas, que con la misma intención de Spoiler Alert, buscan reducir el desperdicio de comida y darle un uso social. Un ejemplo es el Programa Buen Provecho, que durante el 2014 logró, en compañía de Alpina y la Asociación de Bancos de Alimentos de Colombia (Abaco); ayudar a más de 280.000 niños, mujeres en embarazo y lactantes, adultos mayores, en 11 ciudades. Con recuperación y donación de más 500 toneladas de comida se logró suplir la alimentación de estas personas. Actualmente Alpina continúa con el Programa Buen Provecho, que busca reducir el desperdicio de comida, trabajando con aliados como proveedores, distribuidores y establecimientos para que haya menos pérdidas en la cadena de ventas.
Una iniciativa como la de Spoiler Alert podría hacer mucho por disminuir el desperdicio de alimentos y el hambre en la población pobre de nuestro país.
Para más información sobre la disposición de alimentos en nuestra región puedes leer este informe de 2015 de la FAO (Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura).
Imágenes: captura de pantalla y Pixabay.