Ya sabemos –ya sabíamos, hace tiempo–, que a Uber no le gusta el decreto de taxis de lujo. Pero entre los distintos actores del negocio de los taxis amarillos no hay un consenso. Mientras que los representantes de los taxistas dicen estar satisfechos con el decreto, algunas aplicaciones de taxis tienen serios reparos.
Para las apps, hay varios detalles que no están tan claros. “Si quieren que el nuevo servicio sea accesible para todos, ¿por qué los clientes tienen que estar bancarizados y tener tarjeta de crédito?“, le dijo Andrés Gutiérrez, CEO de Tappsi, a ENTER.CO. Otra cosa tiene que ver con el requerimiento de que todas las carreras sean pedidas con un destino. Eso, dice Gutiérrez, puede hacer que los conductores no tomen algunas carreras, dependiendo de hacia dónde se dirijan.
Pero el problema principal es el de oferta y demanda. “Con el decreto como está hoy, la gente va a seguir teniendo los mismos problemas que hoy tiene para conseguir un taxi a las 9 de la noche“. La posición de Gutiérrez siempre ha sido que hay que ampliar la cantidad de taxis que hay hoy en Bogotá, algo que el nuevo decreto no hace: la reglamentación dice que para tener un taxi de lujo hay que sacar del servicio un taxi amarillo.
El problema principal es el de oferta y demanda
Hugo Ospina, presidente de la Asociación de Propietarios y Conductores de Taxi, Asoproctax, discrepó de esa posición en entrevista con ENTER.CO. “Usted no puede infartar las ciudades con carros nuevos“, dice. Sin embargo, tras preguntarle sobre qué hacer entonces para satisfacer la alta demanda, dijo que la solución es levantar la restricción vehicular a los vehículos amarillos. “La culpa es de las autoridades. Tenemos 12.000 carros parqueados todos los días por el pico y placa“.
Ante ese argumento, Gutiérrez responde que “lo mejor no es eliminar del todo el pico y placa, sino hacerlo en ciertas horas y en ciertas zonas“. El empresario asegura que el impacto de quitar la restricción en todas las zonas de la ciudad no sería el mismo, por lo que una medida de ese tipo se debería analizar despacio.
Al final, lo que está detrás de todo esto es la principal queja contra el decreto: que deja el servicio de lujo en manos de los actuales taxistas y, en palabras de Gutiérrez, “termina favoreciendo a las actuales empresas de transporte“, pues obliga a las aplicaciones a contratar con una de ellas para poder prestar el servicio de manera legal. Eso, asegura, va a reducir la competencia, y va a terminar inclinando la balanza a favor de las empresas tradicionales.
Ospina dice que, por el contrario, la nueva reglamentación “pone en cintura” a las apps, que, a su juicio, “estaban trabajando sin ningún control del Estado“. En cualquier caso, la cuestión sobre si esta es una reglamentación justa o un pulso de poder que ganaron los taxistas seguirá debatiéndose.
Imagen: Pedro Felipe (vía Wikimedia Commons)
La misma perra pero echada…
soy de los que creo que la sociedad no se arregla a punta de dar palmaditas en la mano y decir ya ya papito, estuvo mal, no vuelva a chuzar para robarle la billetera y el celular porque eso está mal, y que alguien diga sí, entiendo que estuvo mal, no lo vuelvo a hacer. la solución real viene siendo del orden que si alguien roba y no es robar un pan porque tiene hambre sino robar un celular a mano armada para hacer en un día lo que el que sí tuvo qué trabajar para comprar el celular le tocó ahorrar en varios meses, la solución es cortarle las manos (o una mano la primera vez, la siguiente se le corta el brazo completo, o la otra mano, y se le marca en la frente). a los violadores es cortarles la cabeza, sin segunda opción. igual a los que salen en el periódico que fulanito chuzó no sé cuántas veces a una mujer porque no quiso salir a bailar, y casi siempre son policías. En ese orden de ideas, que los taxistas salgan a emboscar y amenzazar a los que el hacen competencia y a dañarles el carro, igual que cualquier grupo de mafia.. deberían ser ejecutados en el acto, sin segunda opción. lo lamentamos por las viudas y sus familias, pero debieron pensar en eso antes de ponerse con esas, igual que los que se meten a traficar driga, si es que tienen familia. o tal vez pobrecitos, piensen en los niños.. aunque ellos no pensarone n los niños de las familias que ellos mismos se tiraron. simplemente no tienen derecho a existir
por otro lado la ley no debe ser que por un grupo o que si nosotros somos más, la ley es para hacer justicia. meterse de taxista, ya sea para amarillo o para uber, es decisión personal. no creio que haya un tráfico humano donde secuestran a la gente y los obligan a ser taxistas, y que ellos no puedan decidir si quieren conducir de un tipo u otro. eso significa que si no es justo lo de los taxis delugo, pues que se haga la ley bien. y si no es justo que no haya competencia, que se haga la ley bien. la ley no es que si es con un método de pago o no; entonces cuando haya otro método de pago la ley actual ya queda obsoleta?
y por otrolado, aunque de vez en cuando me subo en un taxi, por qué no mirar la actitud de los taxistas amarillos: son los que cierran a los demás en las calles, que se suben por todas partes, que sepsan los semáforos y demás.. pero es que si no se avispan no hacen lo del día.. es decir que ellos aparte de ser la excepción que va por encima de la ley, la ley tiene qué ser hecha para ellos. aunque a alguna persona que se dedique a eso, la verdad no es que me caigan bien, y creo que encontrar a alguien que no sea oportunista pese a que luego salgan a reclamar o incluso a emboscar y amenzar y dañar la propiedad deotros, sería más bien una excepción muy remota. no lamento lo que les pase, y ojalá cada uno pague lo que le hace a la sociedad, en la forma que corresponda