A finales de los 60, Intel introdujo al mercado sus primeros productos, 2 memorias SRAM que, a pesar de su sofisticación para el momento que se vivía, no tuvieron un éxito comercial inmediato.
Aun así, en 1971 lanzó un chip DRAM (la memoria dinámica de acceso aleatorio que todavía usamos en nuestros computadores personales) que al poco tiempo ya representaba más del 90% de sus ingresos.
Menos de 10 años después, sin embargo, nuevos competidores japoneses habían entrado al negocio y los precios de las memorias cayeron dramáticamente.
En un momento en el que hablar de computación era casi que una idea éxotica, un ingeniero de Intel desarrolló –también a comienzos de los 70– el microprocesador (PDF), teóricamente destinado para una calculadora electrónica, pero que por un azar del destino terminó (en realidad fue una evolución del mismo, el chip 8088) sirviéndoles de cerebro a los primeros PC lanzados por IBM al mercado.
En 1984, cuando sus competidores japoneses parecían tener una ventaja inalcanzable en el negocio de fabricación de memorias, Intel tomó la decisión estratégica pero difícil (en ese momento) de salirse del sector y concentrarse en el de microprocesadores, donde actualmente tiene una participación de mercado superior al 80%.
En un momento en que el mundo vive la explosión de la movilidad, Intel tiene el reto de posicionarse en ese mercado que en la actualidad es dominado por ARM, una compañía inglesa que licencia su propiedad intelectual a la mayoría de los fabricantes de celulares inteligentes y tablets como el iPad y los que se anuncian para 2011.
Sobre todo, ahora que Microsoft ha anunciado que Windows 8 será compatible con esa arquitectura.
Otros casos de ‘Auge y ocaso de las empresas tecnológicas’:
Apple, el arte de pensar diferente.
Intel y su primera reinvención http://www.enter.co/industria/intel-y-su-primera-reinvencion/
Intel y su primera reinvención
http://www.enter.co/industria/intel-y-su-primera-reinvencion/