En la era Internet, los diarios impresos han sido de los más afectados con el cambio digital, pues muchas personas ya prefieren la Red para acceder a cualquier tipo de información. Es interesante mirar lo que está sucediendo con The New York Times: acaba de anunciar que tiene 280.000 nuevos suscriptores digitales, pero esto no ha evitado que la compañía siga teniendo pérdidas.
En un anuncio realizado el pasado 21 de julio habla de una pérdida operativa de 114,1 millones de dólares en el segundo trimestre de 2011 comparado con una ganancia operativa de 60,8 millones en el mismo período de 2010. Aunque el grupo se mantiene optimista por su ganancia de suscriptores digitales, es evidente que esta no es la salvación definitiva, por lo menos no a corto plazo.
“El modelo de suscripción digital es un esfuerzo a largo plazo, y su impacto en los ingresos será más evidente a lo largo del año a medida que avanzamos en las primeras etapas del plan. Nuestra capacidad de obtener aún más beneficios económicos con nuestro contenido digital nos proporcionará una nueva fuente de ingresos importante en la segunda mitad de este año”, declaró el grupo en su comunicado de prensa.
El grupo conformado por The New York Times tiene a los sitios web NYTimes.com, About.com, Boston.com y otros sitios y productos digitales. Los ingresos totales por publicidad en los sitios web subieron un 2,6%, y con la introducción de paquetes digitales y sus servicios de suscripción digital gratuita al tener la física, en total suman un millón de usuarios digitales.
The New York Times anunció su plan de suscripción digital en marzo, en las primeras tres semanas había más de 100.000 suscriptores y ahora se acerca a los 300.000. La oferta de introducción es atractiva: por 99 centavos de dólar se ofrece por cuatro semanas tres tipos de suscripción: acceso a NYTimes.com más la aplicación para smartphones, NYTimes.com más la aplicación para tablets, y acceso a las tres ediciones. Pasado este período de prueba, cada una vale 15, 20 y 35 dólares mensuales.
Si bien los datos de pérdidas de un grande de la prensa pueden ser desalentadores para el impreso, la esperanza de la recuperación de la compañía está puesta en lo digital. Entonces, ya la pregunta no es si la prensa digital anulará la impresa –aunque para algunos podría parecer obvia la respuesta al ver las cifras–, sino cómo los grandes periódicos podrán competir dentro del universo digital, donde la información puede venir de fuentes diversas que muchas veces no son las tradicionales periodísticas.
Solo resta esperar y ver qué sucede con The New York Times, que puede ser el ejemplo para otros grandes conglomerados de la prensa.