Proyecto ‘hijo’ de Wayra se expuso en Bulgaria

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Qinaya es uno de los proyectos ganadores de computación en la nube que ha surgido con el apoyo de Wayra. Foto: Jose L. Peñaredonda.
La Academia Wayra apoya desde el año pasado diferentes tipos de proyectos en el que está Qinaya, quienes llamaron la atención de la Universidad de Sofía, en Bulgaría en la que presentaron su experiencia.

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Qinaya es uno de los proyectos ganadores de computación en la nube que ha surgido con el apoyo de Wayra. Foto: Jose L. Peñarredonda (ENTER.CO).

Wayra, la aceleradora de proyectos de Telefónica que en este momento busca 10 nuevos proyectos para impulsar, ya está dando sus frutos gracias las iniciativas que se encuentra apoyando en la actualidad. Como bien lo dijo Gonzalo Martín-Villa, responsable global de Wayra, el que los ganadores actuales hayan adquirido valor es lo que permite que se pueda continuar en la tarea.

Uno de los proyectos que ganó la convocatoria el año pasado fue Qinaya, una iniciativa que ofrece servicios en la nube sin importar el dispositivo en el que se tenga acceso. Pero no es solo para almacenar archivos, lo que buscan es que también sea posible ejecutar programas y aplicaciones desde cualquier lugar.

“La idea surge de buscar la manera no solo de compartir en la nube, sino también de buscar la manera de hacerlo sencillo, en especial en rendimiento. Hay muchos puntos, y si falla uno, fallará todo; y como es tan complejo, quise seguir investigando antes de entrar a la Academía Wayra sobre qué había y qué se puede hacer”, comentó Daniel Quiroga sobre su experiencia como emprendedor.

Qinaya llamó la atención no solo de Wayra, sino también de la Universidad de Sofia, la capital de Bulgaria, en la que Daniel, Luisa Quiroga y Edwin Hurtado estuvieron presentes con su empresa Desafíos Aceptados: “Se llama así porque quisimos meternos en desafíos. Cuando empezamos a trabajar con servidores y redes nos retamos a hacer algo grande”.

La Fundación Alianza Colombo-Búlgara fue la primera en interesarse en el proyecto, buscando fortalecer las relaciones entre ambos países. Por eso la institución decidió llevar la experiencia de Qinaya a la Feria Tecnológica de esa universidad, en la que los empresarios pudieron viajar a mostrar el proyecto con el que ganaron en Wayra.

La experiencia en Bulgaria comenzó desde el momento de crear una presentación que no tuviera una sola letra, que pudiera explicar qué es Qinaya a pesar de la diferencia de idiomas. Además, la Universidad de Sofia quiso ofrecerles a estos emprendedores la experiencia completa, y por eso se quedaron en el campus y pudieron conocer cómo son los estudiantes y los proyectos en el país.

La conferencia en medio de la Feria Tecnológica fue una experiencia nueva para todos, basada en un discurso con una premisa: Creo que el avance de la tecnología se basa en los sueños. Todo comenzó con alguien que soñó con tocar las nubes, siempre se ha soñado con mejorarlo todo. Ese es el inicio de nuestro proyecto, afirmó Daniel.

Qinaya fue el único desarrollo extranjero que se presentó en Sofía, para un público que en su gran mayoría era de estudiantes de ingeniería de últimos semestres. Daniel resalta que aunque existieron problemas con el idioma, entender la idea resulta sencillo. “¿Quién no ha sentido ganas de coger su computador a martillazos porque algo no funciona? Qinaya quiere solucionarlo y hacerlo todo más simple”. Con un público de 550 personas, para todos fue una gran experiencia.

Después del encuentro universitario, los empresarios mostraron el proyecto en la Feria Tecnológica de Plovdiv, que es más de índole industrial. En ella hicieron contactos para trabajar dentro de Qinaya. El viaje duró 20 días, en los que volvieron a desarrollar el proyecto junto con el equipo de Desafios Aceptados: aparte de los tres socios, están Helber Mesa, que trabaja en diseño, y Andrés Ceballos y Marco Figueroa, que trabajan en desarrollo y despliegue en la nube.

La experiencia de ir a Sofia no solo trajo beneficios personales para cada uno -pues la Universidad ofreció la posibilidad para hacer estudios de posgrado para todo el equipo-, sino también contactos para cuando estén listos: “En este momento Qinaya está en desarrollo. Nosotros estamos en un estado de beta inicial en el que vamos a arrancar la producción de software, pero no para una expansión global. Pero los contactos ya quedaron en Europa y es lo más importante”.

Este es uno de los casos más relevantes dentro de la Academia Wayra, que ahora busca nuevos proyectos para apoyar no solo con dinero, sino también con conocimientos y herramientas suficientes para cada iniciativa.

Diana Luque Lavado

Diana Luque Lavado

Escribir me ha llevado por muchos lugares en la vida y ahora estoy escribiendo sobre tecnología, que no es un tema nuevo para mí. Mi vida digital comenzó con mi primer blog en 2006, he pasado por muchas redes y he tenido muchos nicknames.

La conclusión siempre es la misma: la tecnología está para hacernos la vida más fácil.
Acá espero poder hablar también de la motivación de mi vida, el audiovisual. Todos los avances tecnológicos han afectado no únicamente la forma de hacer cine, televisión o videos; también la forma de contar historias. Lo normal en un perfil es decir que estudié Cine en la Universidad Nacional de Colombia, soy guionista y que ahora estudio Literatura en la Universidad Javeriana. Pero prefiero que sepan que soy docente de corazón y que vivo mi vida con pasión. Eso se refleja desde mis escritos, pasa por las clases, y llega hasta Depeche Mode, The Big Bang Theory, Dexter y el té.

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