13 años después, los líos judiciales de Wikileaks siguen en movimiento. Ahora, parece que Julian Assange, creador del sitió en cuestión, podría haber evadido de manera definitiva su extradición a los estados Unidos. Vanessa Baraister, una jueza del Reino Unido, denegó la petición de los Estados de extraditar a Assange.
De acuerdo con la jueza, se desestimaron los cargos presentados por las autoridades norteamericanas, al considerar que la solicitud de extradición tenía fines políticos y no judiciales. Con esto, aseguró que Julian Assange no tendría un juicio justo en los Estados Unidos. También afirmó que el estado mental del acusado era clave y que la presión por parte del gobierno norte americano podría poner en riesgo su vida, con una alta posibilidad de suicidio y pocas garantías por parte del país para prevenirlo.
Assange provocó la ira de las autoridades en los Estados Unidos cuando Wikileaks publicó una serie de documentos, entre los que se encontraron pruebas de acciones contra los derechos humanos por parte de las tropas de USA y sus aliados en Medio Oriente. La obtención de estos documentos y su publicación le ganó a Julian Assange un total de 17 cargos, entre los que se encuentra espionaje y hackeo. Delitos que le aseguran una sentencia mínima de 175 años en prisión al australiano de 49 años.
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En 2012 Assange se refugió y solicitó asilo político en la embajada de Ecuador, en Londres. Allí permaneció, hasta el 11 de abril de 2019, cuando se le retiró la protección y nacionalidad otorgada y fue entregado de inmediato a las autoridades en el Reino Unido. Actualmente se encuentra detenido en la prisión de Belmarsh.
En el caso del mundo de la tecnología, los eventos de Wikileaks sentaron un precedente importante. Por un lado, la página compartió material clasificado que evidenció acciones contra los derechos humanos por parte del ejército (por ejemplo, un ataque de un helicóptero a civiles desarmados, entre los que se encontraba un reportero de Reuters). También ha despertado un debate sobre la libertad de expresión y derechos de los periodistas en el contexto de lo digital, donde las políticas internacionales chocan con los límites físicos de las normas de cada país. También ha impuesto conversaciones sobre hackeo a información clasificada y los peligros para entidades gubernamentales que esto representa.
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