La inteligencia artificial (IA) está transformando la forma en que vivimos, trabajamos y aprendemos. Para comprender cómo esta tecnología impacta y puede estar al alcance de todos, hablamos con Andrés Aguilera Castillo, docente del Centro de Tecnología Analítica de la Facultad de Administración de Empresas del Externado de Colombia y consultor empresarial.
Andrés es politólogo de la Universidad Nacional de Colombia, obtuvo una maestría en Comercio Internacional en Korea University en Seúl, Corea del Sur y un doctorado en Estudios Globales de la Universidad de Urbino en Italia. Su investigación doctoral estudia la digitalización en el Sector Público europeo.
Durante su estancia de investigación en Estonian Business School de Estonia, investigó cómo la digitalización es clave para el desarrollo de la IA. “Sin digitalización, la inteligencia artificial no podría existir tal como la conocemos”, comenta Aguilera, demostrando cómo su formación en ciencias sociales se conecta con las herramientas tecnológicas actuales.
¿Cómo la IA puede estar al alcance de todos?
El Centro de Tecnología Analítica de la Facultad de Administración de Empresas de la Universidad Externado de Colombia, ha buscado activamente amplificar el uso de estas nuevas tecnologías a la comunidad. El objetivo del Centro es claro: fomentar el uso responsable de la IA y hacerla accesible para todos. “No queremos que la inteligencia artificial sea vista como algo reservado para unos pocos expertos. Nuestro trabajo es enseñar cómo estas herramientas pueden mejorar la vida diaria de cualquier persona”, señala Aguilera.
A través de programas de posgrado de la universidad busca formar profesionales que sepan utilizar IA no solo en el ámbito académico, sino también en empresas y el sector público.
“La clave es integrar estas tecnologías en los procesos cotidianos, no solo a nivel individual. Necesitamos que la IA se adopte de manera organizacional para ver un impacto real”, afirma Andrés.
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En su práctica docente, Andrés ha tenido que adaptar sus métodos de enseñanza. “Antes pedía ensayos, pero ahora los estudiantes pueden utilizar IA como ChatGPT para hacerlos. Entonces, los retos han cambiado. Ahora les pido que programen en Python o que desarrollen prototipos para impresión en 3D”, comenta.
Esto refleja cómo las barreras de entrada a la tecnología están disminuyendo drásticamente. Hoy en día, cualquier persona con un dispositivo móvil y acceso a internet puede interactuar con sistemas de IA, lo que está transformando la manera en que las personas aprenden y trabajan.
En Colombia, el acceso a dispositivos móviles y a internet se ha masificado casi a saturación, lo que significa que la mayoría de las personas pueden aprovechar estas herramientas. Sin embargo, Andrés advierte sobre los desafíos que esto conlleva.
“La IA puede acelerar procesos y mejorar la productividad, pero también puede usarse para fines menos éticos, como la desinformación o a manipulación de imágenes y videos. El impacto de la IA es amplio y no siempre positivo”, advierte.
Uno de los mayores riesgos que señala Andrés es la creación de contenidos falsos. “Imágenes falsas y contenido viral pueden generar peligros reales. Por eso es importante que aprendamos a usar estas herramientas de manera responsable”, añade. La educación sobre el uso ético de la IA es un punto clave que tanto el Externado como otras instituciones deben promover.
¿Cómo el sector educativo está ayudando a la transformación?
El Externado no solo trabaja en la enseñanza de la IA a nivel académico, sino también en la formación de alianzas con empresas y el sector público. “La tecnología está cambiando rápidamente y, para no quedarnos atrás, debemos colaborar. Desde la academia, estamos ayudando a formar a las personas que llevarán esta tecnología a sus empresas y organizaciones, pero también es importante que los gobiernos regulen su uso para evitar abusos”, explica Andrés.
Para él, la inteligencia artificial tiene un potencial enorme para mejorar la eficiencia en el sector público, especialmente en procesos que antes eran burocráticos. “La IA puede transformar desde la atención en salud hasta la forma en que se maneja la educación y la seguridad pública”, comenta.
Para aquellos que aún sienten cierto temor ante la IA, Andrés tiene un consejo sencillo: “Cacharrear”, una palabra que en Colombia se utiliza para describir el acto de experimentar sin miedo con algo nuevo.
“La mejor manera de aprender es probando. No necesitas ser un experto en programación para empezar a usar estas herramientas. Solo tienes que atreverte a explorar”, comenta.
Sin embargo, también advierte que es importante usar la IA con prudencia. “La IA tiene una enorme huella de carbono, por ejemplo, estos sistemas consumen mucha energía y agua. Además, está el tema de la privacidad. No debemos subir información confidencial a estos sistemas sin entender completamente los riesgos”, señala.
La inteligencia artificial ya no es algo lejano o exclusivo. Hoy, cualquier persona con un dispositivo móvil puede interactuar con ella y aprovechar sus beneficios. Sin embargo, como lo señala Andrés Aguilera, es esencial que su uso se haga con responsabilidad y prudencia. Desde el Centro de Tecnología Analítica del Externado, se está trabajando no solo en formar profesionales, sino en hacer que la IA sea accesible para todos y, al mismo tiempo, usada de manera ética.
El futuro está en nuestras manos, y la IA es parte de ese futuro. Pero, como bien dice Andrés, “debemos aprender a usarla con curiosidad y con responsabilidad”.
Imagen: Archivo ENTER.CO